Es típico que cuando le decimos adiós a un año, comencemos a evaluar nuestra vida y queramos hacer nuevos propósitos para el nuevo año.
Algunas veces nos frustramos al ver que año tras año seguimos arrastrado los mismos propósitos y con poco éxito de alcanzarlos.
¿Qué puedo hacer para que este nuevo año sea diferente?
Metas
En primer lugar, es importante tener metas que sean realistas y alcanzables dentro del periodo de tiempo que nos proponemos realizarlas. Tener metas a corto y largo plazo.
Esto ayuda a tener un sentido de logro con las metas a corto plazo y menos sentido de frustración por la espera de alcanzar las metas que son a largo plazo.
Las metas deben de ser claras y precisas (ej. quiero aprender inglés) y no generales o ambiguas (ej. quiero hacer algo diferente).
La claridad con que definamos las metas nos ayudará a identificar los pasos específicos que necesitamos hacer para lograrlas.
Consejos
Algunas otras recomendaciones son:
- Establecer metas que no dependan de cambios o acciones de otras personas. Yo puedo tener control de mis decisiones y acciones pero no de las decisiones o acciones de otras personas.
- Reconozca los pequeños logros que va teniendo durante el proceso de alcanzar la meta.
- Buscar apoyo de familiares y/o amistades que puedan tener metas similares o que simplemente quieran apoyarlo a alcanzar sus metas.
- Crear un ambiente positivo y que facilite alcanzar la meta. Por ejemplo, si quieres aprender inglés y tienes niños/as pequeños, vas a necesitar hacer arreglos de cuido para los niños.
- Mantener una actitud positiva. Quitar de la mente pensamientos negativos que te hagan sentir que no vas a lograr las metas. Si desde el inicio piensas que no vas a lograr la meta, las probabilidades de tener éxito son pocas.
- Tomar acción. Muchas veces nuestras metas se quedan en nuestras mentes y deseos y no tomamos las acciones necesarias para lograr nuestras metas. Cada paso, por más simple que parezca va a hacer posible que alcances tus metas.
Perseverancia
Finalmente es importante ser perseverante y compasivo. El camino del éxito no es libre de dificultades, por lo que no podemos rendirnos ante el primer obstáculo. Cada experiencia nos permite ir aprendiendo y mejorando nuestras destrezas y fortalezas.
Es importante que respetemos nuestro ritmo y tiempo. Cada persona, debido a sus propias realidades y experiencias, va desarrollando su propio ritmo de trabajo. Tratar de compararnos con los logros y éxitos de otras personas puede ser injusto y frustrante.
Ser pacientes con nosotros mismos puede ayudarnos a que nuestro caminar sea más llevadero y placentero. Recuerden que esta información no sustituye una consulta con un profesional de la salud emocional. Para mayor información pueden llamar al 919-966-7358.