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¿Qué hacer si en casa hay trastornos de la conducta alimentaria?
Cuando una persona batalla contra trastornos de la conducta alimentaria, toda la familia se afecta en menor o mayor grado. Es muy importante buscar ayuda. Foto: gpointstudio / Adobe Stock.

Los trastornos de la conducta alimentaria (TCA) como lo son la anorexia nerviosa, la bulimia nerviosa y el trastorno por atracón, pueden presentar un reto mayor para las personas que lo padece y para toda la familia.

Cuando una persona en la familia batalla contra un TCA, toda la familia se afecta en menor o mayor grado. Por lo que es muy importante comenzar a buscar ayuda tan pronto como se identifique la condición.

Mitos sobre los trastornos de la conducta alimentaria

Hay algunos mitos que pueden dificultar el sentido de apoyo que puede recibir una persona que sufre de un TCA. A continuación presento algunos de estos mitos:

1) Un TCA es una decisión

Muchos piensan “La persona solo tiene que cambiar de forma de pensar y decidir comer”. La realidad es que los TCA son una condición médica seria y NO es una decisión.

2) La persona con TCA no pone esfuerzo

La batalla emocional que se juega en una persona con TCA es muy fuerte y el proceso de tratamiento y recuperación puede tomar mucho tiempo. Hay momentos donde necesitan un tratamiento intensivo porque a pesar de su esfuerzo, necesitan ayuda profesional adicional.

3) “Yo no soy un profesional de la salud y no puedo ayudar”

Una persona con TCA necesita el apoyo profesional pero también necesita del apoyo familiar. La familia puede ser una extensión del proceso de recuperación.

¿Qué puedo hacer para apoyar a mi familiar con TCA?

  • Buscar información sobre lo que son los TCA.
  • Preguntarle a su persona querida qué necesita. Hay momentos en que la sola presencia o un abrazo es suficiente para demostrarle su apoyo.
  • Evitar hacer comentarios sobre su apariencia física, en especial sobre el peso. Esto es un tema muy sensitivo para una persona con TCA y puede desencadenar en una crisis emocional.
  • Evitar comentarios sobre dietas, sobre el peso de otras personas o practicar ejercicios delante de él o ella.
  • Validar lo difícil que puede ser para la persona el proceso de recuperación.
  • Preguntarle al profesional de ayuda de qué forma en específico puedes apoyar a tu familiar.

¿Dónde encontrar ayuda?

La familia es uno de los valores preciados que forman parte de nuestra cultura latina. No importa la edad de los hijos, la familia extendida de padre, madre y abuelos permiten una red de apoyo físico y emocional entre los miembros de la familia. Especialmente durante una situación de reto en la vida de la persona, tener la familia como fuente de apoyo puede hacer una diferencia significativa en su recuperación.

Para mayor información en español puede conectarse con la página de internet de la Asociación Nacional de Trastornos Alimentarios (NEDA, por su sigla en inglés) www.nationaleatingdisorders.org/neda-espanol

También está la página del Centro de Excelencia para los Trastornos Alimentarios (CEED, por su sigla en inglés) de la UNC www.med.unc.edu/psych/eatingdisorders/informacion-en-espanol.

Recuerden que esta información no sustituye una consulta con un profesional de la salud emocional que pueda identificar situaciones particulares. Para mayor información pueden llamar al 984-974-3795.

Mae Lynn Reyes-Rodríguez, Ph.D. Psicóloga Clínica e Investigadora Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill Departamento de Psiquiatría