Translate with AI to

El 4 de julio se celebra la Declaración de la Independencia en Estados Unidos, cuando ese día de 1776 el Segundo Congreso Continental aprobara el emblemático documento que proclamó el nacimiento y los valores de una nación soberana.  La ocasión se conmemora con banderas ondeando, música en vivo, desfiles, comida tradicional y fuegos artificiales que brindan espectáculos en todo el país.

Esta tradición que honra la independencia es celebrada por ciudadanos y millones de inmigrantes en Estados Unidos, quienes con orgullo se unen a la celebración para honrar las oportunidades que les brinda el “Sueño Americano”.

Sentido de pertenencia

“Yo me siento parte de Estados Unidos, nosotros, los latinos también somos parte de este país. Tengo una sensación de libertad y también de agradecimiento por este país que me dio la bendición de volver a nacer. Lo que más me gusta del país es que hay diferentes tipos de culturas, personas de distintos lugares, también me gusta mucho que hay libertad, seguridad y muchas oportunidades.”, dijo José García. 

“Siento que pertenezco, crezco y quiero dar frutos en Estados Unidos, contribuir a esta tierra. Al mismo tiempo también pertenezco de dónde vengo, porque no puedes ser alguien en otro lugar sin saber de dónde vienes. En Estados Unidos encontré mucha estabilidad, una nueva familia, me casé y es el lugar donde quiero estar, donde me veo en un futuro. Solo tengo que agradecerle a este país de oportunidades, que yo también he sabido aprovechar”, destacó por su parte Dulce Guerrero.

Dulce asegura que muchas personas en el exterior cuando piensan en América, piensan en libertad y en democracia. “¡Que viva la democracia, que viva la libertad! Estoy agradecida de que este país también me ha dado la oportunidad de vivir eso, porque yo soy de Venezuela, un país donde ni siquiera pude votar democráticamente por primera vez en mi vida. Entonces, es algo que me gusta y que me encantaría siempre ver en este país”, enfatizó.

José García, de El Salvador a Charlotte

José llegó al país en 2014 como residente temporal tras una petición familiar y cinco años más tarde, se hizo ciudadano a través del proceso de naturalización. Recientemente, culminó su licenciatura en Administración de Empresas en su país de origen, El Salvador, y está listo para aplicar sus conocimientos en alguna empresa en Charlotte. “Los inmigrantes aportamos muchísimo a la economía de Estados Unidos. Somos personas que dedicamos nuestra vida a dar”, señaló.

Según la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS por su sigla en inglés) en el 2024, los inmigrantes representaron el 19.2 % de la fuerza laboral. De esa cifra, los latinos (incluyendo indocumentados) representan casi la mitad (48.7 %) de la fuerza laboral nacida en el extranjero.

Dulce Guerrero: inmigrante y emprendedora

Dulce llegó al país con una licenciatura en Comunicación Social con especialidad en Publicidad y Relaciones Públicas. Comenzó su recorrido en Estados Unidos como estudiante de inglés para luego también obtener un diplomado en hospitalidad como parte de su objetivo de establecer su negocio propio en la industria de comida, el cual inició hace más de cinco años.

Un estudio publicado por la Asociación Económica Estadounidense (AEA por su sigla en inglés), llamado “Inmigración y emprendimiento en Estados Unidos” reveló que los nacidos en el extranjero se han convertido en creadores de empleos. Según la investigación, en comparación con los ciudadanos nativos, los inmigrantes participan con mayor frecuencia en la creación de empresas en todas las escalas, con una gran cantidad de negocios registrados en todo el país.

“Ser un inmigrante se siente como ser un árbol”

“Para mí, ser un inmigrante se siente como ser un árbol, yo lo explico de esta manera, si tú agarras una planta, un árbol y te lo llevas de allí y lo plantas en otro lugar va a quedar un hueco bien profundo de dónde lo sacaste que siempre va a existir allí, y tú lo vas a llevar a otro lugar a otra tierra, en donde va a florecer, en donde vas a echar raíces, a crecer y va a dar frutos, pero siempre ese árbol también va a pertenecer a otro núcleo”, describió Dulce.

“Siento que sí me he adaptado, pero igual las cosas de mi país se extrañan. El choque cultural también siempre va a estar. Siento que emigrar me cambió la vida. Me hizo crecer, todos los inmigrantes sabemos los sacrificios que hicimos al dejar nuestro país, no es una decisión fácil, pero siento que nosotros nos podemos adaptar a cualquier situación y seguir adelante”, aseveró José.

Resiliencia y raíces  

“Aunque estos tiempos sean difíciles, no siempre va a ser así, tienes que salir adelante, ser un buen ciudadano y una buena persona. Hay que tener fe, recuerden por qué están en los Estados Unidos, que es un país que le va a dar muchas oportunidades y a pesar de que en estos momentos hay mucha incertidumbre y preocupación, siempre va a haber una luz en el túnel. Algo que nos caracteriza a nosotros, los latinos, es que por muy difícil que sea la situación, tenemos un alma fuerte, somos fuertes”, resaltó José García.

Libertad, igualdad y oportunidad

A pesar de los desafíos migratorios en el país, millones de inmigrantes siguen honrando a la bandera de las estrellas y rayas con profundo agradecimiento, reconociendo que los valores sobre los que se fundó Estados Unidos (libertad, igualdad y oportunidad) siguen guiando el camino. Cada uno de ellos, con trabajo y dedicación, continúan escribiendo nuevos capítulos en la historia de una nación construida también por manos extranjeras que hoy llaman a este país hogar.

“Consideramos como evidentes estas verdades: que todos los hombres son creados iguales; que son dotados por su Creador de ciertos derechos inalienables; que entre estos están la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad”, dice una de las frases célebres del acta de la independencia. Una promesa que no expira y que sigue representando esperanza para todos los que viven en esta tierra de oportunidades.

Rebeca Anais Roth es una periodista con más de cuatro años de experiencia escribiendo contenido para medios impresos y digitales. Su pasión por la comunicación trasciende a participaciones audiovisuales...