El 27 de agosto de 1906 nació el hombre que marcaría la historia estadounidense con sus despiadados asesinatos.
Ed Gein (mejor conocido como "El Carnicero de Plainfield") fue un asesino serial a quien internaron por el resto de su vida en un psiquiátrico tras confesar el asesinato de dos mujeres, así como por la exumación de nueve cadáveres de un cementario con los que confeccionó tapicería, vestimenta, alimentos e indumentaria para su vivienda con sus pieles, craneos, así como organos.
El hombre creció en un hogar disfuncional en el que su padre era un maltratador mientras que su madre era una fanática religiosa. Debido a sus creencias, su mamá le prohibió tener amigos de su edad cuando niño y cuando adolescente, y lo sometía a duros castigos.
Sin amigos con los que conversar, el hombre leyó relatos e historietas de asesinatos y de crimenes por los que se fascinó. Igualmente, desarrolló una apatía intensa hacia las mujeres a tal punto que planteó que su madre era su ejemplo de la esposa ideal. En su entorno abundaron más castigos que el afecto y el cariño. Esa confusión le causó un interés en vestirse como mujer. Su hermano mayor, Henry Gein, lo confrontó por sus compartamientos extraños. Sin embargo, murió misteriosamente durante un incendio en un plantío.
Más adelante, si bien es cierto que el asesino no era una persona del todo sociable, se ganó la vida como reparador de utensilios, herramientas y furnituras.
No obstante, la desaparición de Bernice Worden, la dueña de una tienda de utilidades, indujo a las autoridades locales a ir a la vivienda del hombre porque lo habían observado con ella. Al entrar se toparon con su cuerpo. Estaba decapitada y su cabeza tenía un tiro en la frente. Luego de una búsqueda un poco más minuciosa también encontraron la cabeza de Mary Hogan, una mujer desaparecida en 1954.
Ed Gein explicó que las dos mujeres le recordaban a su madre.
La Noticia produjo este perfil con información de la Enciclopedia Britannica.