Las senadoras del Partido Republicano por Alaska y por Maine, Lisa Murkowski y Susan Collins, se unieron contra la posibilidad de nominar a un nuevo juez o jueza al Tribunal Supremo de Estados Unidos a menos de dos meses de las elecciones.
Las dos senadoras han asumido posturas contrarias a la mayoría republicana senatorial en varias ocasiones durante el cuatrienio.
Por un lado, la senadora Murkowski mencionó que se opuso en 2016 a que el Partido Demócrata completara una vacante al estar en año electoral. Por lo tanto, en esta ocasión mantendrá la misma postura.
“Durante semanas he planteado que no apoyaré completar una potencial vacante del Tribunal Supremo a tan poco tiempo de las elecciones”, expresó. “Lamentablemente, lo que era en el pasado una realidad hipotética ahora es una posición que no ha cambiado”.
My statement on the Supreme Court vacancy: pic.twitter.com/jvYyDN5gG4
— Sen. Susan Collins (@SenatorCollins) September 19, 2020
Por el otro lado, la senadora Collins dijo que lo correcto era cederle el nombramiento al nuevo presidente electo. El objetivo sería mantener la justicia, la consistencia y la fe en el proceso.
“Dada la proximidad de la elección presidencial, no creo que el Senado deba votar por el candidato antes de la elección”, esbozó. “La decisión sobre un nombramiento vitalicio para la Corte Suprema debe tomarla el presidente, que es elegido el 3 de noviembre”.
The Senate and the nation mourn the passing of Justice Ruth Bader Ginsburg and the conclusion of her extraordinary American life.
— U.S. Senator Mitch McConnell (@SenMcConnell) September 19, 2020
My full statement: pic.twitter.com/NOwYLhDxIk
No obstante, el líder de la mayoría republicana en el Senado, Mitch McConnell, anunció que el nominado del presidente obtendrá el voto del cuerpo. Esto se suma a las expresiones del presidente en las que ha alegado que, entre las posibles alternativas, se encuentra una mujer.
“En las últimas elecciones antes de la muerte del juez Scalia en 2016, los estadounidenses eligieron a una mayoría republicana en el Senado porque prometimos controlar y equilibrar los últimos días del segundo mandato de un presidente fracasado”, expresó McConell.
“Desde la década de 1880, ningún Senado ha confirmado a un nominado de la Corte Suprema de un presidente del partido opuesto en un año de elecciones presidenciales”, agregó.
Se reaviva la disputa entre senadores republicanos y demócratas
La muerte de Ruth Bader Ginsburg ha ocasionado una disputa entre ambos partidos en búsqueda del nombramiento de la siguiente vacante en el Tribunal Supremo.
Hasta el momento, se desconoce si más voces republicanas se sumarán al ruedo.