Entre las numerosas advocaciones de la Virgen María, la de la Medalla Milagrosa ocupa un lugar especial. Esta medalla, dotada de significado espiritual y simbolismo, ha capturado el corazón de fieles alrededor del mundo.
¿Cuál es la historia de la Virgen de la Medalla Milagrosa?
En el París del siglo XIX, la Virgen María se apareció a Santa Catalina Labouré, una humilde religiosa de la Compañía de las Hijas de la Caridad. Durante una serie de visiones en 1830, la Virgen reveló a Santa Catalina el diseño de una medalla que traería consuelo, gracia y milagros a quienes la llevasen con fe.
Esta medalla, conocida como la Medalla Milagrosa, fue acuñada y distribuida, convirtiéndose en un símbolo poderoso de la protección maternal de María.
¿Por qué el 27 de noviembre se celebra a la Virgen de la Medalla Milagrosa?
El 27 de noviembre conmemora la aprobación eclesiástica de la medalla y se celebra como el día de la Virgen de la Medalla Milagrosa. Esta fue la fecha de la primera aparición de la Virgen a Santa Catalina Labouré.
La celebración de la Virgen de la Medalla Milagrosa es un momento de reflexión y gratitud para los católicos de todo el mundo. En esta fecha, los fieles se congregan en iglesias y santuarios para rendir homenaje a la Virgen y buscar su intercesión en sus vidas. Es una ocasión para renovar la devoción y recordar los muchos testimonios de milagros y gracias atribuidos a la mediación de la Virgen de la Medalla Milagrosa.
La medalla fue un objeto que la propia Virgen presentó a Santa Catalina diciéndole:
"Haz que se acuñe una medalla según este modelo. Todos cuantos la lleven puesta recibirán grandes gracias. Las gracias serán más abundantes para los que la lleven con confianza".
¿Qué significa la Medalla Milagrosa?
La Medalla Milagrosa es un objeto de devoción que encierra un simbolismo profundo y se considera un canal de protección espiritual para quienes la llevan con fe:
Anverso:
- María, Inmaculada y con los brazos extendidos, sobre la cabeza de la serpiente que está sobre el mundo.
Reverso:
- La cruz como el misterio de redención de Cristo, en señal de sacrificio y entrega.
- Una M, símbolo de María y de su maternidad espiritual.
- Sobre la M hay barra que es una letra del alfabeto griego, "yota" o I, que es monograma del nombre, Jesús.
- En la parte inferior se representan al Sagrado Corazón de Jesús y el Sagrdo Corazón de María.
- Alrededor, doce estrellas que son signo de la Iglesia que Cristo fundó con los apóstoles.
En la devoción a la Virgen de la Medalla Milagrosa, encontramos consuelo y fortaleza para enfrentar los desafíos de la vida, confiando en la intercesión amorosa de María, nuestra Madre celestial.
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Oraciones a la Virgen de la Medalla Milagrosa
Oh Virgen María, Madre de la Medalla Milagrosa
en tus manos depositamos nuestras alegrías y tristezas
nuestros temores y esperanzas.
Concede a quienes llevan tu medalla la gracia de tu protección maternal.
Virgen Milagrosa, fuente de consuelo y esperanza
intercede por nosotros ante tu Hijo, Jesucristo
y obtén para nosotros las gracias que tanto necesitamos
especialmente [menciona tus intenciones personales].
Que tu amor maternal nos guíe y sostenga
y que podamos seguir tu ejemplo de fe y entrega.
Amén.
Oh María, sin pecado concebida,
ruega por nosotros que recurrimos a ti.
Sin tardanza pregona lengua mía las glorias y alabanzas de María.
Atiende a mi socorro, gran Señora, y ampáreme tu diestra protectora.
Oh Jesús, que te has dignado glorificar con innumerables milagros a la bienaventurada Virgen María, inmaculada desde el primer instante de su concepción, concédenos que los que imploramos su protección en la tierra, podamos gozar eternamente de tu presencia en el cielo, tú que con el Padre y el Espíritu Santo vives y reinas, Dios, por los siglos de los siglos.
Amén.
Oh Jesús, que para realizar tus mejores obras, escogiste las cosas débiles del mundo, a fin de que ninguna se gloriara ante tu presencia, y que para aumentar y difundir la fe en la Inmaculada Concepción de tu Madre, quisiste que la Medalla Milagrosa se manifestara a santa Catalina Labouré, concédenos que llenos de esa humildad podamos glorificar este misterio con alabanzas y obras.
Amén.
Oración de consagración a la Virgen de la Medalla Milagrosa
Oh Virgen, Madre de Dios, Inmaculada María,
nos ofrecemos y consagramos a ti,
bajo el título de Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa.
Que esta Medalla sea para cada uno de nosotros,
prenda del amor que nos tienes,
y nos recuerde nuestros deberes para contigo.
Que siempre que la llevemos nos bendiga tu amorosa protección,
y nos conserve en la gracia de tu Hijo.
Oh Virgen poderosa,
consérvanos siempre a tu lado en todos los instantes de nuestra vida.
Concede a estos hijos, la gracia de una buena muerte,
para que en unión contigo podamos gozar para siempre de la eterna felicidad.
Amén.
Oración a La Milagrosa para la sanación
¡Oh María, sin pecado concebida, por tu inmensa bondad y tierna misericordia,
te pido por todos los enfermos que te invocan con confianza!
Oh Madre piadosa, a quien la Iglesia llama confiada ¡Salud de los enfermos!,
aquí me arrodillo implorando tu poderosa intercesión.
Lo que tantos afligidos obtenían por la palabra y los signos de tu Hijo Jesucristo,
lo reciba este querido enfermo (nombre por quien se desea orar),
a quien te encomiendo, mediante la aplicación de tu bendita Medalla.
Que su eficacia, tantas veces probada y reconocida en todo el mundo,
se manifieste una vez más para que cuantos seamos testigos de este nuevo favor tuyo, podamos dar testimonio agradecidos y exclamar: ¡El Señor y la Medalla Milagrosa te han curado!
Amén.