Un reporte desclasificado por la Oficina del Director de Inteligencia Nacional el 16 de marzo revela que operaciones extranjeras de Rusia e Irán intentaron influir en las elecciones estadounidenses.
El informe concluye que Irán intervino para dinamitar la confianza en el proceso electoral, afectando las posibilidades de reelección aspiradas por el expresidente Donald Trump.
Actores cibernéticos iraníes enviaron amenazadores y falsificados correos electrónicos pretendiendo hacerse pasar por el grupo "Proud Boys" para remitirlos a electores demócratas en varios estados del país, exigiendo a los votantes cambiar su afiliación partidaria y votar por la reelección del expresidente Donald Trump,
detalla el reporte.
Por otro lado, indica que Rusia desarrolló operativos para desprestigiar al candidato Joe Biden, quien terminó por ganar las elecciones estadounidenses.
tomaron acciones a lo largo del ciclo electoral para dañar las relaciones de Estados Unidos con Ucrania, denigrar al presidente Biden y su candidatura, y beneficiar los prospectos de reelección del expresidente Donald Trump,
detalla el documento refiriéndose a la interferencia rusa.
El reporte pormenoriza que gobiernos como el de Venezuela y Cuba intentaron influir en la opinión pública y las narrativas expresadas en la campaña. Asimismo, descarta injerencia china.
Igualmente, criminales cibernéticos intentaron perjudicar el proceso preliminar de las elecciones con fines económicos.
Sin embargo, el reporte aclara que no hay pruebas de que algún ente extranjero cambiara votos o manipulara el proceso electoral.
No hay indicaciones de que ningún actor extranjero intentó interferir en las elecciones de Estados Unidos mediante la alteración de ningún aspecto técnico del proceso electoral, incluyendo el registro de votos, emisión de boletas, tabulación de votos o reporte de resultados,
subraya el documento.