Kelvin Silva es residente de Charlotte desde hace años y miembro activo de la comunidad.
Pero su deportación es inminente.
El hombre de 44 años se encuentra actualmente bajo la custodia del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en el Centro de Detención Stewart en Lumpkin, Georgia.
Los abogados dicen que se enfrenta a la deportación a la República Dominicana, un país que no le es familiar.
Ahí probablemente se encontrará entre personas sin hogar y a miles de kilómetros de su familia o parientes.
Los abogados se apresuran para intentar detener la deportación planificada de ICE de Silva para que su caso pueda ser escuchado ante un tribunal federal.
Así defienden su caso
El grupo de defensores que abogan por su caso, recordó en un comunicad la Ley de Ciudadanía Infantil de 2001, o CCA.
Ella reemplazó el estatuto de ciudadanía en cuestión con una nueva versión de la ley que omite la regla de Guyer, racialmente discriminatoria, y no se le dio efecto retroactivo a la CCA.
Según la CCA, Silva y muchos otros inmigrantes negros en situación similar que han residido de manera permanente y legal en los Estados Unidos durante décadas serían reconocidos como ciudadanos estadounidenses.
"Estoy pidiendo una oportunidad para quedarme con mi familia", dijo Kelvin Silva el jueves 14 de enero por la tarde.
“Por eso estoy luchando en este caso”, aseguró.
“Por mi familia y para otras familias como la mía, otras personas como yo. Asumí la responsabilidad de mis decisiones y cumplí mi condena”, indicó.
“Todo lo que quiero es estar con mi familia por si me deportan, no sé cuándo ni si los volveré a ver”, lamentó.
Cuando Silva tenía 11 años, su padre lo trajo a Estados Unidos desde República Dominicana.
Su padre murió seis años después y Silva finalmente fue víctima del sistema de justicia penal de Estados Unidos, según el comunicado.
Una vieja ley lo acerca a la deportación
Ha estado luchando por su caso de deportación durante años desde la custodia de ICE.
Siempre esperó que sus reclamos de ciudadanía y la discriminación inconstitucional contra él y su padre eventualmente fueran escuchados.
Y es que la Regla Guyer, codificada por primera vez en la Ley de Nacionalidad de 1940, impedía que los padres ciudadanos estadounidenses transmitieran la ciudadanía a hijos nacidos fuera del matrimonio.
La regla restringió desproporcionadamente cómo los padres no blancos podían asegurar la ciudadanía para sus hijos, y durante décadas se mantuvo por esa misma razón.
El juez de inmigración en el caso de Silva sostuvo que debido a que los padres de Kelvin nunca se casaron legalmente, no podrían haber logrado una "separación legal" y, por lo tanto, Silva no obtuvo automáticamente la ciudadanía estadounidense a través de su padre.
Silva y sus defensores planean impugnar la decisión por motivos constitucionales.
Southern Poverty Law Center (SPLC) y el Proyecto Nacional de Inmigración del Gremio Nacional de Abogados (NIPNLG) son los abogados que lo respaldan.
Ellos insisten que Silva sería un hombre libre en casa con su familia y reconocido como ciudadano estadounidense si no fuera por esto.
No conoce a nadie en República Dominicana
“Mi hermano, Kelvin, ha estado aquí desde que tenía 11 años”, dijo Jasmine Peña, hermana de Silva.
“Toda nuestra familia está aquí, no tiene a nadie en República Dominicana”, abundó.
“Es un gran padre y un hermano increíble. No nos lo quiten”, pidió.
“No lo hemos visto en más de 11 años, y esto nos romperá aún más, sabiendo que estaría solo en un país donde casi no conoce a nadie”, indicó.
"El caso de Kelvin destila lo peor de la política de inmigración de los Estados Unidos, cuya base está arraigada en la supremacía blanca", dijo Meredyth Yoon, abogada de servicios directos de la Iniciativa de Libertad de Inmigrantes del Sureste de SPLC.
"La lucha contra la negritud impregna nuestro sistema de inmigración”, denunció.
“Y vemos sus efectos de manera cruda en el caso de Kelvin, un padre y abuelo negro que ahora enfrenta la deportación a un país que no conoce”, explicó.
Pero es posible que Silva nunca tenga su día justo en la corte si ICE procede.
Sus defensores instaron a la comunidad de Kelvin a pedir a ICE y a sus funcionarios electos que detengan la deportación injusta que podría ocurrir dentro de las próximas 24 horas.
Silva, que padece asma crónica, tiene un mayor riesgo de sufrir complicaciones por COVID-19, que se agrava por la detención prolongada y los viajes inminentes.