Muchas veces tenemos muy claro en nuestra mente lo que queremos para nuestra vida presente y futuro. Sin embargo, nuestro entorno no hace reflejo de lo que visualizamos o queremos para nuestra vida. Hay personas que pueden ser muy enfocadas en su vida y lograr sus metas a pesar de las personas que lo rodean, sin embargo, también es cierto que la energía que nos rodea puede influenciar nuestras decisiones y por ende nuestro diario vivir y futuro. En otras palabras, estar rodeados de personas que tienen energías negativas o inconsistentes con lo que quieres lograr en la vida, puede afectar tus logros. Es por eso que es importante seleccionar a las personas que nos van a acompañar en la vida.
¿Cómo puedo saber si las personas que me rodean son las que me convienen?
Hacer un inventario de tus amistades
Identifica cómo te sientes cuando estás rodeada de cada una de tus amistades. Usualmente, buenas amistades son aquellas que hacen que salga lo mejor de nosotros y nos motiven a ser mejores personas. Aquellas personas que sacan las emociones más negativas de ti, pudieran ser una mala compañía en la vida.
Identifica el alcance de la amistad
Cada amistad aporta algo único a nuestra vida y es importante tener claro cuál sería esa contribución para no tener expectativas mayores. Hay personas que pueden ser buenas en dar consejos, otras nos dan compañía y otras pueden darnos apoyo emocional. No podemos esperar que una sola persona provea y supla todas nuestras necesidades.
Hacer una mejor selección
Al momento de buscar nuevas amistades, es importante buscar aquellas personas que sean más consistentes con la visión de vida que tienes o la que quieres alcanzar. Por ejemplo, si tu visión de vida es de progreso profesional, es importante estar rodeada de personas que te apoyen y te motiven y no te obstaculicen el alcanzar tus metas o bajen tu auto-estima.
Con familiares
Quizás pensarás que esto no aplica a la familia que nos toca porque no las puedes escoger. Es cierto que cuando nos rodeamos de familiares que atraen energías negativas puede ser más dificultoso porque no podemos desprendernos de ellos, pero si podemos establecer fronteras que sean saludables.
Por ejemplo, podemos controlar la dosis
, es decir el tiempo que quieres pasar junto a ese familiar y la frecuencia con la que quieres interaccionar con él o ella. De esta manera, reconoces que, por ser un familiar, es alguien importante en tu vida, pero vas a controlar cuánto quieres que esa persona influencie en tu vida.
Recuerden que la energía es contagiosa y si queremos mantener energías positivas, será importante rodearnos de personas que transmitan esa energía positiva. Recuerden que esta información y/o recomendaciones no sustituyen una consulta con un profesional de la salud emocional. Para mayor información pueden llamar al 984-974-3795.