La batata, también conocida como boniato, camote o papa dulce, es una hortaliza de sabor dulce y color variable, puede ser blanca, amarilla, morada o naranja. Esta coloración se debe a su alto contenido de carotenos, pigmentos que tienen efectos positivos en nuestro organismo debido a su poder antioxidante. Es muy nutritiva, rica en fibra, potasio, Vitamina C, magnesio y calcio.
Esta semana les traigo una receta deliciosa, llena de mucho color y sabor.
Ingredientes
2 Batatas medianas
1 Berenjena mediana
¼ Taza de quinoa
1 Cebolla mediana
2 Tomates
El jugo de 1 limón
3 Cucharadas de aceite de oliva
2 Cucharadas de vinagre
Sal y pimienta al gusto
Cilantro al gusto
Queso Parmesano
Preparación
Precalentar el horno a 350F. Pelar las berenjenas y cortarlas en rebanadas finas, colocarlas en una bandeja previamente rociada con un poco de aceite de oliva y hornear por unos 20 minutos o hasta que estén transparentes. Retirar del horno y reservar.
Igualmente lavar las batatas y hornearlas por 30 minutos o hasta que al introducirles un palillo estén suaves, retirar del horno y dejar reposar para cortar por la mitad y retirarles con una cucharilla el centro con mucho cuidado tratando de no romper la cascara.
En una olla con una taza de agua agregar la quinoa y cocinar por 20 minutos, escurrir y reservar.
Cortar la berenjena horneada en tozos pequeños. Cortar el tomate y la cebolla en cuadritos. En un envase hondo colocar la quinoa, berenjena, tomate, cebolla, cilantro y una vinagreta preparada con el limón, aceite vinagre, sal y pimienta, mezclar bien. Integrar el puré de las batatas a esta mezcla y colocarla con una cuchara dentro de las cascaras, rociar con el queso parmesano y hornear por 3 minutos. Adornar con cilantro picadito.