Charlotte - Una familia latina se encuentra consternada luego de presuntamente tener la visita de dos agentes de Inmigración en su casa en la madrugada del domingo 26 de marzo, y que luego de eso su camioneta “van” que estaba estacionada frente a la casa, desapareciera sin dejar rastro.
“Eran como las 5:30 a.m. del domingo cuando alguien comenzó a tocar la puerta de enfrente con mucha fuerza. No sabíamos quién era entonces me asomé por la ventana del segundo piso para ver y me dí cuenta que era un agente del ICE, cuando al darse vuelta tenía las letras blancas en la espalda de su chaleco”, aseguró Simans Sánchez a La Noticia.
Sánchez es un padre y esposo hondureño, que reside en una casa propia al este de Charlotte desde hace 10 años; además él y su esposa María se encuentran protegidos con el TPS, mientras que sus dos hijas son nacidas en éste país. Los Sánchez afirmaron que son una familia cristiana, que se congrega en la Iglesia Tabernáculo de Vida.
Brian Cox, portavoz del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE), aseguró a La Noticia que la agencia “no toma vehículos como parte de sus acciones de Inmigración”.
“Verifiqué con nuestro liderazgo local de ICE, y no tuvimos oficiales el domingo en esa ubicación. Estos individuos necesitan contactar a las autoridades locales respecto a su vehículo y esta agencia no tiene nada que ver con lo que pasó”, indicó el portavoz a La Noticia.
Alguien abrió el carro a la fuerza
El hondureño aseguró ver a los agentes que vestían ropa oscura, y que uno de ellos se encontraba parado al lado de una Suv sin marcar que estaba con el motor encendido en medio de la calle.
“El otro estuvo tocando la puerta como media hora, mis hijas estaban aterradas, parecía que la iba a tumbar. En eso oímos que empezó a sonar la alarma de nuestra camioneta, sonaba y sonaba, seguro querían que saliéramos pero no lo hicimos. Alguien la abrió a la fuerza, eso es seguro”, dijo el hondureño.
“Cuando miraba por detrás de las cortinas, vi como el agente alumbró hacía la ventana con una linterna”, comentó el inmigrante.
La pareja cuestiona la manera en que los agentes llegaron a su casa y se quejan de las consecuencias que la “visita” tuvo para ellos.
“Nos quedamos sin el único vehículo que teníamos en buenas condiciones para movilizarnos, ahora todo se ha complicado”, dijo.
Albergaron una madre con sus dos hijas
Al indagar con la familia, pudimos saber que en 2014 los Sánchez albergaron por unos pocos días a la esposa de un sobrino de Simans, quien había llegado de Honduras con sus dos hijas.
“Seguro la buscaban a ella, pero ella se fue la misma semana que llegó”, contó.
Los Sánchez decidieron llamar a la policía para hacer la denuncia esa mañana, pero aún no tienen idea del paradero del vehículo.
“Me preocupa que esté en un sitio donde llevan los carros, y que me cobren después”, mencionó el hondureño.