Al momento, después de la toma de Kabul de parte de los talibanes y con esto se vislumbra que todo el país esté en sus manos, Rusia y China han buscado tener contacto con el posible nuevo gobierno de Afganistán.
Estos dos países son los únicos que se han acercado al grupo talibán desde que tomaron la capital del país, pues no abandonaron sus embajadas como la mayoría de países, incluido Estados Unidos.
El embajador ruso, Zamir Kabulov, informó que se reunirá con una representación de los talibanes el próximo martes, para hablar del futuro del país.

"Garantizan ya la seguridad del perímetro exterior de la embajada rusa. Mañana (martes) van a hablar de este tema a largo plazo", dijo Kabulov a la radio Ekho Moskvy.
China, indicó este lunes que quería mantener "relaciones amistosas" con los talibanes pues comparten 76 kilómetros de frontera, por lo que no quieren problemas entre ambas naciones.
China y Rusia parece que están dispuestos a reconocer al nuevo gobierno de Afganistán, dependiendo de sus siguientes acciones, pues desde que tomaron Kabul, parece que el Talibán ha suavizado su discurso.