Los migrantes de Centroamérica, principalmente, siguen desplazándose por México a través de diversas vías para buscar atravesar la frontera.
Unos optan por hacerlo de manera visible y en grupo, como la caravana que sigue avanzando por el sur, ya con menos de un millar de personas. Otros escogen las rutas clandestinas controladas por los traficantes. Así lo hicieron las casi 200 personas que las autoridades localizaron hacinadas en un hotel del norte del país.
El Instituto Nacional de Migración (INM) indicó en un comunicado que 195 migrantes, la mayoría centroamericanos y entre los que había menores, fueron detectados en Apodaca, una localidad en las afueras de la ciudad de Monterrey, hacinados, "sin alimento ni agua, en cuartos de un hotel”.
Ochenta eran de Honduras; 38 de El Salvador; 36 de Guatemala; 36 de Nicaragua; una de Cuba; una de Perú y tres de la República Dominicana
Los migrantes, que fueron detectados por la fiscalía estatal, quedaron bajo tutela del INM. Ante este tipo de situaciones se les retiene en estaciones migratorias o los devuelven a sus países de origen.
El mismo miércoles, también en el norte del país, la fiscalía federal informó de la localización de 54 migrantes de Honduras, Guatemala y Nicaragua que aparentemente estaban en cautiverio en tres domicilios distintos de la ciudad de Nogales, fronteriza entre los estados de Sonora y Arizona.
Caravana de migrantes también quiere llegar a la frontera
Después de recorrer casi 500 kilómetros desde que el 23 octubre salieron de la ciudad de Tapachula, casi en la frontera con Guatemala, apenas queda un millar de personas. El miércoles pasaban la noche en una comunidad del municipio de Jesús Carranza, en el estado de Veracruz. El resto se ha ido separando del grupo o ha aceptado la propuesta de regularización del gobierno mexicano.
"Voy a confiar en ellos, ya no quiero seguir caminando, no puedo. Yo lo que quiero es trabajar y, si es cierto, lo voy a aprovechar", dijo el hondureño José Luis Rodríguez.
Mientras unos grupos se subían a plataformas de camiones para avanzar más rápido. Otros seguían caminando, aproximadamente medio centenar de migrantes hicieron lo mismo que Rodríguez. Según el INM, más de 1,500 habían aceptado la propuesta que miembros del instituto les reiteran en cada parada del camino.
"No los vamos a regresar en Tapachula", garantiza Héctor Martínez Castuera, el funcionario del INM que negocia con los integrantes de la caravana. "A nombre del gobierno federal reiteramos lo que el Instituto Nacional de Migración ha venido manifestando. Uno, regularizar a todas las mujeres embarazadas con su núcleo familiar; a los menores con su núcleo familiar; a las personas en estado vulnerable y su núcleo familiar; y a discapacitados y adultos mayores con su núcleo familiar".
La desconfianza, sin embargo, persiste porque el INM decía que, para poder acogerse a esta propuesta, los migrantes debían ser trasladados a otros estados del país.
La caravana, que avanzaba muy lentamente y ante la atenta mirada de las fuerzas de seguridad, tiene previsto seguir caminando hacia el norte. Sólo en un par de ocasiones ha habido choques con los agentes.
Mientras tanto, en Tapachula algunos migrantes se preparaban ante el rumor de que un nuevo grupo pudiera empezar a caminar el jueves, justo cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador tiene previsto reunirse con su homólogo Joe Biden en la Casa Blanca para hablar, entre otros temas, de migración. En la cita de Washington también estará el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau.
Desarrollado por La Noticia con información de AP.
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