Aproximadamente uno de cada tres hogares de ancianos en todo el estado informó una escasez de enfermeras y asistentes según datos de los Centros de Servicios de Medicare y Medicaid.
Hogares de ancianos
A medida que la pandemia de COVID-19 entra en su tercer año, los hogares de ancianos de todo el estado están sintiendo los efectos.
Aproximadamente una de cada tres instalaciones en todo el estado informa una escasez de enfermeras y ayudantes.
Casi el 40 % de los hogares de ancianos del estado que respondieron a una encuesta del gobierno indicaron que enfrentan algún tipo de escasez de personal.
¿Por qué no hay suficientes empleados?
La Asociación de Instalaciones de Atención Médica de Carolina del Norte descubrió que la pandemia y los bajos salarios fueron las principales razones que citaron los empleados para abandonar su trabajo.
Una encuesta que completó la asociación durante el verano estimó que la fuerza laboral ha disminuido en un 12.5 % desde enero de 2020. Más de 15,000 empleados han dejado las instalaciones.
La escasez está causando que algunas instalaciones dejen de aceptar nuevos residentes. En el otoño, alrededor del 60 % de las instalaciones en todo el estado informaron que restringieron las admisiones.
Vacunas requeridas
El mandato federal de vacunación podría reducir aún más la fuerza laboral. Una orden ejecutiva emitida por el gobernador Roy Cooper obliga a los empleados a recibir una vacuna COVID-19 o hacerse la prueba semanalmente.
Alrededor del 21 % de los empleados de hogares de ancianos siguen sin vacunarse en Carolina del Norte, según los datos federales más recientes.
Brotes en hogares
Esta semana, el Departamento de Salud y Servicios Humanos de Carolina del Norte informó casi 250 brotes en curso en hogares de ancianos en todo el estado. En todo el estado, el 13 % de los residentes de hogares de ancianos no están vacunados.
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