Las personas vienen a vivir a Estados Unidos por diversas razones. La mayoría aprecia a este país como la tierra de las oportunidades para mejorar sus condiciones de empleo, estudiar, y en general mejorar su calidad de vida. Invariablemente, venir a Estados Unidos conlleva a un proceso llamado aculturación
, que refiere en este contexto a incorporar costumbres del país a que inmigramos.
En ciertos aspectos el proceso de aculturación puede resultar simple, e incluso beneficioso. Por ejemplo, comenzar a gozar de mejores ingresos que permite comprar vehículos, productos electrónicos, poder enviar ayuda financiera a familiares, hechos que tal vez eran muy difíciles de lograr en el país de origen.
Sin embargo, existe otro aspecto del proceso de aculturación que impone un costo en las personas que inmigran generando lo que se conoce como estrés por aculturación.
Adaptarse a un nuevo ambiente
El estrés por aculturación es percibido por la mayoría de los inmigrantes en diferentes grados, pues la persona que inmigra se expone a múltiples desafíos relacionados con las demandas de acostumbrarse o aculturarse
en un nuevo país.
Desafíos comunes son adaptarse a un nuevo ambiente social, a diferencias culturales, a nuevos ambientes laborales y académicos, a nuevas situaciones de viviendas.
Otro común desafío es la falta de dominio del idioma inglés que limita la competitividad laboral, reduce o inhibe la participación social y dificulta la inserción al sistema. Adicionalmente, los inmigrantes padecen en mayor medida de aislamiento, falta de contacto con familiares, o dificultad de establecer relaciones sociales debido a las diferencias culturales o del idioma.
Sentimiento de culpa
En ocasiones, el inmigrante además siente culpa por dejar amigos y familiares en el país de origen, en particular si estos se encuentran enfermos. Todos estos son factores que predisponen al estrés por aculturación.
Estos factores se incrementan dramáticamente cuando las personas ingresan al país sin documentos migratorios pues además de los desafíos comunes a todo inmigrante, ellos cuentan con la imposibilidad de salir del país a visitar a sus familiares, poseen mayores dificultades para hallar empleo, carecen de transporte fiable, son víctimas de desmembramiento familiar debido a las deportaciones, o son sujetos de discriminación y prejuicios
Busque ayuda profesional
El estrés por aculturación requiere de mucha atención dado que puede afectar a las personas emocional, mental, e incluso físicamente causando depresión, ansiedad, baja autoestima, y trauma. En estudiantes, el estrés por aculturación reduce desempeño académico o causa el abandono escolar.