Existen varios programas y visas en Estados Unidos que, para obtenerlos, requieren de un patrocinador. Este es quien se compromete a apoyar financieramente a un inmigrante que es quien se beneficiará de estos procesos. Como sucede con el parole humanitario, la visa familiar, de trabajo, y en algunos casos, en el asilo o por medio de la Ley de Violencia contra la Mujer (VAWA).
Ante esto, la abogada de inmigración, Jennifer Ezeigwe, explica que a diario muchas personas asumen este rol de patrocinador sin comprender las responsabilidades legales y financieras que esto implica.
Este desconocimiento puede llevar tanto al patrocinador como al patrocinado a tomar decisiones cómo utilizar beneficios o ayudas económicas del gobierno para los cuales no califican y, en consecuencia, esto acarrea consecuencias migratorias.
¿Qué responsabilidades asume un patrocinador?
De acuerdo con la abogada de inmigración, típicamente se piensa que ser patrocinador es simplemente ayudar a un familiar o a un amigo a llegar a Estados Unidos, sin entender que esto conlleva un contrato con el gobierno. Y si se incumple, la persona podría ser demandada por ello.
Este contrato lleva por nombre Declaración Jurada de Patrocinio Económico, y a través de él se compromete a:
- Brindar apoyo económico al inmigrante patrocinado.
“En esta declaración la persona está diciendo que es responsable por todo lo que tenga que ver con financiamiento y dinero para el patrocinado y como es un contrato tiene peso de ley, diciendo que te vas a hacer cargo de la persona hasta 10 años o hasta que esa persona tenga su ciudadanía”, indicó la abogada.
- Reembolsar al gobierno por las ayudas que solicite el patrocinado.
Como ejemplo, la abogada explicó: “Si tú patrocinas a un primo para que venga a vivir a Estados Unidos y asumes una responsabilidad financiera hacia él. Y si después de llegar, tu primo solicita y recibe asistencia pública, como Medicare o ayuda en efectivo (cash assistance), el gobierno puede considerar que tú, como patrocinador, eres responsable de esos costos. Por lo tanto, el gobierno podría exigir que devuelvas el dinero gastado en asistencia pública, argumentando que, como patrocinador, es tu responsabilidad cubrir esos gastos”.
- Verificar que si el inmigrante patrocinado solicita alguna ayuda, que incluya los recursos económicos del patrocinador.
Explica la abogada que, si bien el incluir los recursos económicos del patrocinador puede ocasionar que el patrocinado ya no califique para la ayuda, el omitir esta información va a afectar al patrocinador en su economía y caso migratorio.
- Evitar que el patrocinado se convierta en carga pública.
En consecuencia, debe cubrir sus gastos por atención médica, vivienda, alimentación y necesidades básicas.
¿Qué es la Ley de carga pública?
“Esta ley evalúa a las personas que aplican para visas o para cambios de estatus de sus procesos migratorios. Lo que busca es que la gente no se convierta en una carga pública para el gobierno. Con ella, el gobierno se asegura de que las personas que vengan y quieran quedarse en Estados Unidos no sean dependientes y, si se cree que lo serán, entonces pasan a ser inadmisibles para sus solicitudes”, dijo Ezeigwe a La Noticia.
Según el Servicio de Ciudadanía e Inmigración, los beneficios que se consideran carga pública son:
- Seguridad de Ingreso Suplementario (SSI).
- Asistencia en efectivo bajo el programa de Asistencia Temporal para Familias Necesitadas (TANF).
- Programas de asistencia en efectivo estatales y locales que proporcionan beneficios para el mantenimiento de ingresos (a menudo llamados programas de Asistencia General).
- El uso a largo plazo del Medicaid.
¿Cómo la Ley de carga pública afecta al patrocinador?
Advierte la abogada que quienes están en un proceso de patrocinio (tanto el patrocinador como el patrocinado) deben ser especialmente cautelosos al momento de solicitar ayuda del gobierno. En específico, de las asistencias señaladas anteriormente. Las consecuencias podrían ser que la persona pase a ser considerada una carga pública y, por lo tanto, Inmigración podría negarle:
- La solicitud de patrocinio
- El ajuste de estatus para obtener la tarjeta verde o residencia permanente.
- Futuras visas que solicite, por ejemplo, la de trabajo
- La solicitud de ciudadanía
- La solicitud de parole humanitario para sus familiares
Añadió que otros beneficios migratorios que se niegan a quienes son considerados carga pública son:
- La admisión a Estados Unidos, incluso con visa
- La renovación de su visa actual
- El Estatus de Protección Temporal (TPS)
- La solicitud de asilo y refugio, si se comprueba que mintió en ellas en relación con su situación económica
“No es lo mismo quien solicita asilo a quien está cambiando su estatus para pedir a familiares que están en otro país con parole u otros procesos. Allí las reglas son diferentes, es más delicado, porque esta persona se supone que va a ser el patrocinador de sus familiares. Entonces, estas personas no deberían aplicar para ciertos beneficios y, si lo hicieron, deben consultar a un abogado antes de ingresar estas solicitudes”, recomienda Ezeigwe
Ezeigwe trabaja en la Firma de Abogados Sussman, la cual ofrece asistencia legal con casos de familia, inmigración y negocios. Para conocer más sobre sus servicios, visite: Sussmanlawfirmpllc.com.