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La neuralgia postherpética, conocida popularmente como “culebrilla”, es una condición catalogada como la complicación más común del herpes zóster. Se caracteriza por la aparición de un sarpullido en la piel que luego se convierte en ampollas muy dolorosas, generalmente localizadas en el tórax, siguiendo el trayecto de un nervio intercostal, o en la cara, siguiendo el trayecto del nervio trigémino.

Las personas con mayor riesgo de presentar esta enfermedad son las siguientes:

1. Adultos de 60 años o más.

2. Pacientes con inmunosupresión ocasionada por enfermedades crónicas como la diabetes, enfermedades inmunológicas como el SIDA, o aquellos que están recibiendo quimioterapia o radioterapia.

3. Personas con el antecedente de haber padecido herpes zóster y que no comenzaron a tomar medicamentos antivirales dentro de las 72 horas de la aparición del sarpullido en la piel.

4. Personas no vacunadas contra el herpes zóster.

Tratamiento

El tratamiento indicado se centra en combatir la sintomatología del paciente y en el uso de antivirales antes de que se cumplan las 72 horas desde el inicio de las manifestaciones en la piel.

Prevención

La mejor prevención es la aplicación de la vacuna contra la culebrilla (neuralgia postherpética) y el herpes zóster, conocida comercialmente como Shingrix, también llamada “Vacuna Recombinante contra el Herpes Zóster”. Esta vacuna está indicada para la prevención del herpes zóster (HZ) y de la neuralgia posherpética (NPH) en los siguientes casos:

1. Adultos a partir de los 50 años de edad.

2. Adultos a partir de los 18 años de edad que tienen un mayor riesgo de HZ.

La pauta de primovacunación consiste en dos dosis: una dosis inicial seguida de una segunda dosis dos meses después. En personas de 50 años o más, la segunda dosis se puede administrar entre dos y seis meses después de la primera aplicación. En personas que son o podrían llegar a ser inmunosuprimidas, se puede administrar la segunda dosis entre uno y dos meses después de la primera aplicación. No se ha establecido la necesidad de administrar dosis de refuerzo tras la pauta de primovacunación.

Shingrix no está indicada para la prevención de la infección primaria por el virus de la varicela.

Falsos sobre la culebrilla

Es importante recordar al público que es falsa la creencia de que si la culebrilla aparece en el tórax y le da la vuelta completa, la persona morirá. También es falso que se cure con “pólvora y unas ramas” o que sea necesario acudir a un “brujo” porque los médicos no pueden curarla. Ante cualquier duda, debe consultar a su médico de confianza o acudir al centro de salud más cercano para obtener la debida orientación.

¿Cómo se puede adquirir la vacuna Shingrix?

Actualmente, hay 6 formas de adquirir la vacuna Shingrix:

1. Desde 2023, con la cobertura de la Parte D del Medicare, no tiene que pagar por ella.

2. Con el programa Medicaid, hay que preguntar primero a su aseguradora si su plan cubre esa vacuna.

3. Muchos seguros médicos privados cubren la vacuna, por lo cual debe comunicarse con su aseguradora.

4. El laboratorio farmacéutico Glaxo Smith Kline proporciona vacunas gratuitas para adultos elegibles. Para más información, visite www.shingrix.com

5. Puede comprarla directamente por su cuenta en establecimientos como CVS, Walgreens o Walmart.

6. Si no tiene seguro médico, obtenga más información sobre las opciones de cobertura médica a bajo costo llamando al CDC al teléfono: 1-800-232-4636 (para español, presione el 2).

Médico y columnista de semanarios en New York, New Jersey, Delaware, Pennsylvania, Connecticut, Texas, Florida y California. Conductor de “Mente, Cuerpo y Alma” wtcradio.net, canal 2, los viernes...