Translate with AI to

Magbis Núñez sobrevivió al Linfoma de Hodgkin, un tipo de cáncer que se origina cuando las células del cuerpo comienzan a crecer sin control. Su caso no fue el primero en su familia. Desde hace más de 50 años esta enfermedad ha afectado a varias generaciones.

Núñez nació en Venezuela y se mudó a Charlotte en el 2001. Antes de mudarse ya había visto cómo el cáncer se había llevado la vida de algunos de sus familiares. Por esta razón, en el 2010 comenzó a trabajar en Renacer, una organización que apoya a las personas que tienen esta enfermedad.

Yo comencé a trabajar porque tengo familiares con cáncer”, relató Núñez, quien es coordinadora del programa. En estos 12 años asegura que ayudó a más de 200 personas.

El cáncer en 3 generaciones

La primera vez que el cáncer se llevó a uno de sus familiares fue a su abuela, quien murió a causa de un linfoma en 1970. La enfermedad se la detectaron en 1968.

Por su familia materna, Núñez tuvo tres familiares con cáncer. Se trató de tres de sus tíos. Dos de ellos fallecieron: uno tenía células cancerígenas en la espina dorsal y el otro sufrió de linfoma Non-Hodgkin. El tercero tiene cáncer de próstata y en el riñón.

En su familia paterna también hubo recurrencia de la enfermedad en tres de sus tías. Una de ellas se encuentra batallando con células cancerígenas en su ojo y otra con cáncer de seno. A causa de este último tipo de tumor maligno falleció otra de las hermanas de su papá.

Además, la hermana de Magbis es sobreviviente de Leucemia.

A Núñez le detectaron células cancerígenas mientras se encontraba ayudando a otras personas a superar el cáncer.

Durante mi proceso de trabajar con Renacer, sentí una bolita en el cuello y esta resultó ser un tipo de cáncer. Yo ya lo sospechaba por la reacción del doctor y porque llevaba años trabajando con pacientes y sobrevivientes de cáncer”, recuerda.

“La familia sufre muchísimo”

Cuando le detectaron el cáncer, Magbis estaba casada y tenía dos niñas, una de 8 años de edad y otra de 11. “Fue difícil para la familia todo este proceso. Mi hija pequeña se desconectó demasiado. No me hablaba y se encontraba molesta con la situación. Fuimos a terapia y la psicoterapeuta nos explicó que para ella era una forma de protegerse porque sentía que yo la iba a dejar y sentía rabia y necesidad de no conectarse con una persona que se va”, recuerda.

La familia sufre muchísimo, aunque muchas veces no se lo deja saber a uno. Yo al tiempo me enteré de que mi hermana, quien para ese tiempo estaba embarazada, sufría muchísimo y lloraba sola. Después me enteré de que mi hermano sufría. Son cosas que uno se entera con el tiempo. Igual sufrían mis hijas y otros familiares. La familia sufre en silencio. A mi mamá yo no hallaba cómo hacérselo saber. Yo creo y me atrevo a decir que los familiares sufren más que uno”, lamenta.

Núñez tuvo un tratamiento que consistió en 19 radiaciones y 8 quimioterapias con 4 medicamentos. Sin embargo, uno de ellos le causó intoxicación de los pulmones.

Asegura que pasar por una situación similar a la de los pacientes que Renacer, la sensibilizó, además le ayudó a comprender las implicaciones de la salud y las preocupaciones económicas que muchas veces tienen estas personas por los recibos que tienen que pagar, por no contar con un seguro, entre otros temas.

Durante esta travesía comprendió que los tiempos de espera entre un examen y los resultados de este pueden llegar a ser “un tormento” para un paciente con cáncer. “Desde que hacen la biopsia y te dicen lo que tienes y te dan un diagnóstico final es un momento bastante difícil. Hay mucha ansiedad porque uno no tiene idea de lo que tiene, ni que tan grave es o qué tanto se ha regado”, dijo.

Ojalá que todos los profesionales de salud entiendan la agonía que uno sufre durante la espera de los resultados. A veces pasas una semana y eso se te hace una eternidad. En mi caso, yo durante esos días comencé a somatizar, me comencé a desesperar. Es todo un proceso bien difícil”, agregó.

¿Cómo prevenir?

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) recomienda a todos los pacientes contar con un registro de las enfermedades y condiciones que se dan en su familia. “Los miembros de su familia pueden compartir genes, hábitos y entornos que pueden afectar su riesgo de contraer cáncer”, advierten.

Informar a su médico sobre su historial de salud familiar es el primer paso para averiguar si usted puede tener un mayor riesgo de cáncer. Podría ayudarlo a usted y a su médico a decidir qué pruebas necesita para detectar el cáncer, cuándo comenzar y con qué frecuencia debe hacerse la prueba”, recomiendan los CDC.

Para Magbis, una de las formas más importantes en la prevención es lograr la detección temprana a través de la atención médica. Recomienda a las personas estar al día con su chequeo médico y a las mujeres hacerse la mamografía. “Es la mejor técnica de cómo usted lo puede detectar. Cada vez tenemos más mujeres a quienes les detectan el cáncer en etapa 1 y esas son más victorias”, dijo.

“Sin senos también hay paraíso”

En los años que Magbis tiene trabajando con pacientes con cáncer ha visto el impacto positivo que tiene para ellos el estar acompañados durante todo el proceso. “Creo que contar con un grupo de apoyo es muy importante, porque uno ve y piensa: si otra persona pudo salir adelante, entonces yo también puedo hacerlo. Y el latino, como cultura, le da mucho valor a la parte social”.

La coordinadora del programa Renacer asegura que ha trabajado con muchas pacientes con cáncer de seno. Señala que esta experiencia ha sido una bendición y una inspiración para valorarse a sí misma como sobreviviente y para apoyarlas mejore a ellas. “Sin senos también hay paraíso”, expresó.

Magbis recomienda siempre a sus pacientes que “vivan el aquí y el momento”. En su experiencia, esta actitud positiva ha ayudado a pacientes de cáncer a enfrentar mejor el tratamiento. “He tenido pacientes que les daban seis meses y vivieron más de dos años solo porque aprendieron a vivir más el momento y pasaron su tiempo viviendo con calidad”, relató.

Apoyo a pacientes y sus familiares

El programa de Renacer está conformado por un grupo de latinos sobrevivientes del cáncer que viven en Charlotte y que apoyan a quienes estén pasando por esta situación o a sus familiares.

Cada interesado es conectado con una mentora que haya tenido y sobrevivido al mismo cáncer del paciente. “Apoyamos con información educativa, recomendaciones sobre lo que tienen que comer, ayuda mental, emocional, conversaciones de apoyo y muchas otras actividades. También conectamos con organizaciones que puedan ayudar a los pacientes con necesidades económicas”, dijo.

Este es un programa para mujeres y para hombres. Para todos los que han sido detectados y lo que queremos es poder ofrecer todo lo que tiene que ver con la vida saludable y el bienestar completo y los familiares están completamente invitados. Este es un programa para ellos también. A nosotros nos gusta apoyarlos, porque usualmente están muy cargados”, explicó.

Para obtener más información sobre este programa, pueden llamar al 704-533-2682 o enviar un correo electrónico a: Magbis.love@atriumhealth.org.

YouTube player

Otras historias sobre sobrevivientes de cáncer:

https://lanoticia.com/latinos-fuera-de-serie/quiero-volver-a-ver-a-mi-hija-latina-lucha-con-un-cancer-recurrente/
https://lanoticia.com/latinos-fuera-de-serie/sobreviviente-al-cancer-de-seno-recomienda-regala-una-mamografia/

Periodista de profesión, ávida lectora por vocación. Tiene un máster en Ciencias Criminológicas de la Universidad del Zulia, Venezuela. Le apasiona conocer nuevas realidades y contarlas.