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Celebrar la Navidad hace que pasemos por alto las cosas esenciales. Es normal llenar estos días de estrés para extender las horas con el fin de lograr todos los pendientes. Tiempo que se va entre las filas a la hora de salir de compras, la búsqueda de los regalos, la elección del menú navideño y los planes de cómo y dónde reunirse en familia. Pero como padres, no debemos olvidar los valores que la Navidad nos ayuda a enseñarle a nuestros hijos.

Los adultos se esmeran en organizar las reuniones familiares, estar en contacto con la fábrica de los juguetes, probar recetas y decorar. Para los niños, la Navidad es ilusión, risas y magia alrededor de la fantasía de personajes como Santa Claus y, más adelante, los Reyes Magos. Cada día es una expectación a lo que habrá la mañana del 25 en el pie del árbol, y el recibir lo que pidieron en sus cartas es la explosión de las emociones.

En el trasfondo, la Navidad es realmente una oportunidad para vivir el nacimiento del Niño Dios, pero además de crear en nuestro hijos recuerdos que perdurarán toda la vida. Es un momento en el que la generosidad brota y se hace propicia para cultivar valores que resonarán en los corazones mucho después de que las luces festivas se hayan apagado.

¿Qué valores enseñar en Navidad?

Estos son los principales valores que la Navidad impulsa y le dan sentido a las celebraciones, pero además crean espacios de enseñanza para toda la vida en los niños:

1) El valor del compartir.

Navidad es compartir, sí. Es aprender a apreciar la presencia de quienes nos rodean. Es la intención de brindarles tiempo, el regalo más valioso que podemos dar. Los padres, debemos enseñarle a los hijos que las reuniones en familia son un tesoro que los acompañarán toda la vida. Además, es allí donde también se forman las tradiciones que se trasladarán de generación en generación.

2) Generosidad y solidaridad.

Por naturaleza, los niños están más preparados para recibir que para dar. De pequeños, es normal que no quieran compartir sus juguetes, e incluso a sus afectos. Es allí donde se pueden crear formas para enseñarlos a ver alrededor, donde algunos tienen menos o simplemente nada esa Navidad. Donar ropa y juguetes nuevos o usados en buen estado, así como participar en obras benéficas, son opciones para fomentar la generosidad y la solidaridad.

3) Agradecer

Conforme podemos hacer que nuestros hijos miren lo que otros no tienen, también nos ayuda a dejarlos ver y saber que son bendecidos por sus bienes. Y no son solo los bienes materiales (ropa, juguetes o regalos), sino aquellos vistos como todo lo que les pertenece, incluyendo: la familia, la comida, el hogar. La gratitud es un arte y construye una base sólida de humildad y aprecio.

4) Amor y alegría

No hay Navidad sin amor, porque es el amor de Dios el que lo hizo enviar a su hijo para ser el salvador de la humanidad. Y eso nos provee la alegría de reconocer el regalo tan valioso que nos dio. No olvidemos demostrar con palabras de amor y reconocimiento a quienes nos rodean, más a los hijos de cualquier edad. Es un bonito momento para expresar nuestro orgullo hacia ellos, recordar y celebrar sus logros durante el año.

5) Perdonar

Este momento de la época en la que estamos haciendo una reflexión del año, luce bien para desempolvar esas cosas que se han quedado en el interior de los niños para permitirles que se abran al perdón. Muchas veces, de adultos arrastramos rencores producto de situaciones que ocurrieron tiempo atrás, pero por no sanar en su momento se convierten en heridas. Es así como los niños pueden aprender a perdonar a ese amigo que un día le dañó su juguete; o al hermano que no quiso jugar; o incluso al padre o la madre que lo hizo sentir mal. Con el tiempo, aprenderán a llevar relaciones sanas y a no guardarse sentimientos que se convierten en ataduras emocionales.

Los valores surgen en cadena. Cuando cultivamos uno, vienen con él otros que están relacionados. No desperdicies el momento de transmitirlos y proteger la integridad emocional de los niños en el futuro.

Lic. en Comunicación Social. MBA en Mercadeo. CEO de Link BTL. Disfruto de leer y escribir. Soy madre y esposa agradecida con la vida. jgimenez@lanoticia.com