Comer por estrés es una práctica muy común en estos tiempos. La comida se convierte en un consuelo en los momentos difíciles, cuando estamos aburridos y sobre todos cuando nos encontramos muy estresados.
Vamos al refrigerador o a la alacena aún cuando no sentimos hambre con la ilusión de que la comida nos ayudará a tranquilizarnos, pero sucede lo contrario. Después del atracón llega la sensación de arrepentimiento y el estrés no sólo sigue ahí, sino que aumenta.
Es por eso que los nutricionistas recomiendan primero hacer una pausa antes de comer para avaluar si en verdad es hambre o bien comemos por estrés, aburrimiento, soledad o ansiedad. Este es el primer paso para prevenir comer por las razones equivocadas.
Sigue estos consejos para evitar comer por estrés
- Elimine las tentaciones en la casa: Evite tener en casa antojitos como panes, galletas, frituras, helados y dulces. Estos alimentos suelen ser muy tentadores cuando se está estresado.
- Evite las dietas muy restrictivas: Llevar una dieta demasiado restrictiva en la que consuma muy pocas calorías puede provocar atracones de alimentos ricos en calorías y comer en exceso. Estos sucederá más en casos de estrés.
- Planee sus comidas: Nutricionistas recomiendan planificar sus comidas con unos días de anticipación. Esto puede ayudar a tener un mayor control de las comidas, a mejorar la calidad de la dieta y a reducir el riesgo de comer de más.
- Manténgase hidratado: Mantener una hidratación adecuada es importante para la salud en general y puede ayudarlo a evitar comer en exceso por estrés. Estar deshidratado puede provocar alteraciones en el estado de ánimo, la atención y los niveles de energía.
- Ponga atención a lo que come: Es importante minimizar las distracciones al comer una comida o un refrigerio, especialmente si come en exceso con frecuencia. Evite comer frente al televisor, la computadora o el celular. Al concentrarse en lo que come evitará comer en exceso y puede ayudarlo a ser más consciente de su ingesta de alimentos.
- Realice actividades relajantes: Practicar actividad física diariamente así como actividades relajantes le ayudará a controlar más su estrés. Pruebe escuchar música relajante, tomar un baño caliente, practicar meditación o yoga o probar la aromaterapia.