Tristemente algunos políticos que no pueden obtener lo que quieren por la vía democrática, buscan la vía de la manipulación y tener el sistema a su favor, protagonizando desvergonzadas maniobras desbordadas de ambición pero carentes de moral. Esto ocurrió a finales de abril, cuando la nueva Corte Suprema de Carolina del Norte dio dos golpes traicioneros a nuestra democracia.
La recientemente posesionada Corte Suprema estatal, ahora de mayoría conservadora, tomó dos decisiones que afectarán la forma cómo se hace las elecciones en Carolina del Norte: Aprobó de facto la manipulación partidista de distritos electorales (gerrymandering), y ratificó la imposición del requisito de presentar un documento de identidad con foto a la hora de votar.
Manipulación partidista de distritos electorales
El máximo tribunal estatal desestimó, el 28 de abril, un fallo previo que declaraba ilegales los mapas de redistribución de distritos electorales. Para entender mejor este fallo, hagamos un poco de historia.
Los distritos electorales son las áreas geográficas en donde aplica un cargo electoral, por ejemplo, representantes para la Asamblea General del estado. A cada distrito se le asignan diferentes direcciones postales. Esto determina muchas veces el sentido de la votación en dichos distritos, ya que muchos suelen aglomerar a miembros de una o varias comunidades.
En el 2016 los legisladores republicanos rediseñaron los distritos para favorecer a los candidatos de su partido, mediante mapas que desafiaban toda lógica geográfica, dividiendo centros urbanos (con tendencia demócrata), para que tengan menos importancia a la hora de elegir a los representantes.
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¿Cuál es el puntaje de integridad de Carolina del Norte?
Esta descarada manipulación partidaria generó diversas críticas. Por ejemplo, el profesor Andrew Reynolds, miembro del Proyecto de Integridad Electoral, una iniciativa de las Universidades de Harvard y Sydney que busca cuantificar la integridad de las elecciones en 164 países, señaló que el puntaje de integridad electoral de Carolina del Norte era tan bajo como el de Cuba, Indonesia y Sierra Leona.
Las demandas por los mapas electorales no se hicieron esperar. Una corte ordenó que se vuelvan a diseñar, pero los nuevos mapas tenían los mismos problemas. El 3 de septiembre del 2019, un panel de jueces dictaminó que los nuevos mapas legislativos estatales estaban severamente manipulados de forma partidaria (gerrymandering) para beneficiar a los candidatos republicanos, lo que violan la Constitución del estado y debían una vez más ser rediseñados.
Hoy, el fallo de la nueva Corte Suprema estatal, anula todo el proceso anterior y, en la práctica, significa que los legisladores tendrán mayor libertad para trazar los límites de los escaños de la Asamblea General para la próxima década.
El regreso de las identificaciones para los votantes
Pese a que los casos de fraude electoral son extremadamente raros en Carolina del Norte, muchos políticos tratan de vender la idea de que miles de personas votan de manera ilegal, por supuesto, sin presentar evidencia. Esto motivó a que algunos legisladores propongan exigir un documento de identificación a los votantes para que ejerzan su derecho.
¿Cuál es el problema con el presentar una identificación? Históricamente este tipo de requisitos se han dado para restringir el acceso al voto a minorías y a gente pobre.
Hoy, la nueva corte ratificó la obligación de presentar una identificación con foto al momento de votar, medida que la anterior Corte Suprema había anulado por considerar que se basaba en prejuicios raciales.
No importa de qué partido político venga, cuando un grupo de poder depende de la manipulación y el oportunismo para lograr sus objetivos, están atacando descaradamente nuestra democracia.
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