Los huevos son indispensables en la dieta diaria de las personas. A pesar de que algunos lo comen con precaución debido al colesterol, se considera que este alimento tiene más nutrientes en favor del organismo.
Dentro de las Pautas Alimentarias para Estadounidenses de –, los huevos forman parte del patrón de alimentación saludable. Y aunque existen muchos mitos y hasta estudios que tratan de evidenciar los efectos de un alto consumo de este alimento, en general se le considera básico en la dieta.
¿Claras o yemas?
Ambos, pero depende de las necesidades de cada persona. En una dieta diaria puede consumirse entero. Sin embargo, a las personas con el colesterol elevado o con regímenes especiales de alimentación, se les suele suprimir las yemas.
Las claras contienen la mayor cantidad de proteína, vitaminas y minerales del huevo; mientras que la yema aporta la mayor cantidad de grasas y calorías. Es importante acotar que a pesar del colesterol el huevo es bajo en grasas saturadas.
Huevos, proteína de calidad
El Departamento de Agricultura de los Estados Unidos establece que los huevos contienen:
- 155 kcal
- 12,58 gramos proteínas
- 10,61 gramos de grasa
- 2,3 gramos de hidratos de carbono
- y 185 mg de colesterol
Otras fuentes alimentarias que se encuentran en el huevo son: vitaminas A, B6, B12, D, E y K. Entre los minerales están el zinc, hierro, cobre y selenio. Luteína, calcio, potasio, ácido fólico, fósforo, betaína y colina son otros nutrientes que complementan a este versátil alimento.
Importancia del huevo en la salud
Los nutrientes de los huevos lo hacen un alimento con características a favor de:
- Promover la salud del corazón.
- Proteger al hígado.
- Contribuir en el desarrollo del cerebro del bebé en el vientre de su madre.
- Proteger los huesos.
- Mantener sanas las funciones cerebrales.
- Evitar la degeneración macular (trastorno en la retina).
- Cuidar la piel, el cabello y las uñas.
¿Cómo deben comerse los huevos?
Los huevos son fáciles de preparar para comer de forma rápida. Las combinaciones con vegetales son complementarias y se producen resultados excelentes. Las formas más básicas de comerlo son:
Cocido, entero o hervido
La mejor manera de prepararlo para aprovechar los nutrientes a plenitud. Se dejan hervir de 5 a 8 minutos y se pasan por agua fría antes de quitarles la cáscara.
Frito
Aunque es el menos apropiado para no aumentar su grasa, se recomienda que se use aceite de calidad como el de oliva. También es importante no dejar muy cruda la yema para evitar el riesgo de salmonela.
Revuelto
Se usa aceite pero en menor cantidad que cuando se hace frito. Es la forma ideal para combinar con vegetales.
Recuerda que todo en exceso trae sus consecuencias para el organismo. Antes de someter a tu cuerpo al consumo de un solo tipo de alimento de forma diaria debes estar seguro de que es favorable según tu edad y condición de salud.