El proyecto de Ley de Carolina del Norte pretende darle solidez a la práctica ilegal de enviar facturas falsas que en ocasiones son difíciles de identificar.
Las letras pequeñas suelen ser tan pequeñas que pasan desapercibidas para algunas personas que terminan pagando lo que creen es una factura real. Fue lo que advirtió el senador republicano, Bill Rabon, al notar que sus padres recibían facturas de suscripción a revistas que terminarían pagando por simplemente no notar que se trataba de una estafa.
Hasta ahora, en su defensa los estafadores pueden decir que ellos sí hacen saber a los clientes que no están recibiendo una obligación de pago, que muchos no leen.
Por eso el Proyecto de Ley del Senado 488 busca que el solo hecho de incluir un descargo de responsabilidad no sea una defensa contra el crimen.
El proyecto de ley podría avanzar en el Senado esta semana, toda vez que pretende proteger a personas honestas, como explicó Rabon.
¿Cómo protegerse de las facturas falsas?
El Departamento de Justicia de Carolina del Norte hizo una lista de estafas de facturas comunes que se deben evitar en hogares y empresas:
- Solicitudes que parecen facturas. La letra pequeña le pide que se registre para suscripciones o servicios nuevos.
- Solicitudes de información de contacto actualizada. Estos remitentes de correo o faxes le piden que actualice o verifique la información de contacto de su empresa para obtener una lista de directorio. Al firmar, acepta pagar por un nuevo anuncio con un precio excesivo.
- Facturas falsas que le piden que pague suministros de oficina o servicios de telecomunicaciones que su empresa nunca recibió.
- Facturas por suministros que nunca ordenó. Según la ley de Carolina del Norte, no tiene que pagar ni devolver los artículos que recibe pero que no solicitó.