Los inmigrantes que se encuentran en el país recibieron el día de hoy un duro golpe, luego de que la Corte Suprema falló en contra de aquellos que intentaban ser liberados de largos períodos de detención en lo que impugnaban sus órdenes para deportarlos.
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La Corte se pronunció hoy en dos casos de inmigrantes que temen ser perseguidos si son devueltos a sus países de origen.
Los fallos dejaron en claro que para la Corte los inmigrantes tienen derecho, según una ley federal, a una audiencia de fianza en la que podrían argumentar a favor de su libertad.
Esto sin importar cuándo fueron detenidos y cuanto tiempo lleven en esa situación jurídica.
De igual forma, los jueces también limitaron la capacidad de los inmigrantes de presentar una demanda colectiva con seis votos a favor y tres en contra.
'Este fallo dejará a muchos extranjeros vulnerables incapaces de proteger sus derechos.'
Declaró la jueza Sonia Sotomayor
De unos años para esta fecha, la Corte ha seguido un camino en el que limita cada vez más el acceso de los inmigrantes al sistema judicial federal.
'Durante un tiempo, parecía que la corte iba a contraponerse un poco. En casos extremos, interpretaría un estatuto para permitir la mayor revisión judicial posible. Ahora está claro que la corte ya no está dispuesta a hacerlo.'
Señaló Nicole Hallet, directora de la clínica de derechos de los inmigrantes en la facultad de derecho de la Universidad de Chicago.
Como resultado, los inmigrantes que demandaron para tener una audiencia de fianza enfrentan la posibilidad de ser detenidos.
Dichas detenciones podrían prolongarse por meses y hasta años antes de que sus casos sean resueltos.
Los inmigrantes y el fallo en contra de la Corte
El fallo de hoy de la Corte fue contra inmigrantes de México y El Salvador que temen ser perseguidos en sus países.
Ellos habían convencido a funcionarios del Departamento de Seguridad Nacional de que sus temores eran ciertos y sus casos necesitaban ser revisados.
Sus abogados argumentaron que debería tener una audiencia ante un juez de inmigración para determinar si deberían ser puestos en libertad.

Y esto depende de si ellos suponen un peligro o si es probable que huyan si los liberan.
El juez Samuel Alito redactó la opinión de la Corte en el que sostenía que los jueces federales sólo pueden fallar en el caso de los inmigrantes que tienen ante sí, no sobre un grupo de personas en situación similar.
Pero los jueces Stephen Breyer E,lena Kagan y la misma Sotomayor discreparon de ese decisión.
'La posibilidad de unirse en una demanda colectiva es muy importante para las personas que no tienen derecho a un abogado. Y es desproporcionadamente improbable que estén familiarizadas con el sistema jurídico de Estados Unidos o que dominen el idioma inglés.'
Escribió Sotomayor sobre la decisión del juez Alito