Por muchos años, las campañas electorales se conciben como un concurso de imágenes más que una contienda por las mejores propuestas. Muchos votantes se inclinan por un candidato por cómo los hace sentir, si les inspira confianza o si proyecta alguna característica determinada, dejando en segundo lugar sus planes de gobierno. Esto no es nuevo, pero quizás en estas elecciones 2024 ya llegó la hora de cambiar.
Una de las transformaciones más notorias entre la imagen y la política ocurrió en 1960, durante el primer debate televisado entre dos candidatos a la presidencia de Estados Unidos.
El debate presidencial más visto de la televisión
En 1960, los votantes todavía no tenían un claro favorito. Por un lado, los republicanos tenían a un veterano de la política: el entonces vicepresidente Richard Nixon; mientras que los demócratas tenían a un joven (43 años) y virtualmente desconocido senador, John Fitzgerald Kennedy.
El 26 de septiembre de 1960 se realizó el primer debate presidencial televisado. Nixon insistió en hacer visitas de campaña, para cuando llegó a la estación de televisión se lo veía agotado. Adicionalmente, se negó a usar maquillaje y no se había afeitado.
Kennedy lucía fresco y atento, había tomado un baño de sol y se lo veía con un ligero bronceado, mientras que su oponente se veía tenso, recostado, con ambos pies pegados al piso, las rodillas juntas y una mano sobre el muslo. Claramente, se notaba que estaba incómodo sobre la silla.
Otro punto que afectó a Nixon fueron las luces del estudio, pues generaban calor y al no usar maquillaje, se lo notaba sudado, lo que muchos interpretaron como una señal de nerviosismo.
¿Realmente estos detalles pueden marcar una diferencia? Varias encuestas señalaron que quienes oyeron el debate por la radio dieron como vencedor a Nixon, mientras que los que lo vieron por la televisión tenían un claro ganador. Kennedy.
Este debate rompió récords de sintonía. Para hacer una comparación, mientras que el reciente debate entre Kamala Harris y Donald Trump fue visto por unos 67 millones de telespectadores, el de Kennedy y Nixon se calcula que fue seguido por unos 70 millones. Más espectadores, hace casi 70 años.
Elecciones 2024: Propuestas más allá de la imagen
En estas elecciones 2024,¿continuaremos tomando decisiones basadas en aspectos superficiales? Vivimos un momento único de la historia, en donde el futuro de su familia y su comunidad están en juego en las próximas elecciones del 5 de noviembre.
Tanto Kamala Harris como Donald Trump están virtualmente empatados en Carolina del Norte. Su voto será decisivo. Es hora de dejar de lado el ruido y escuchar las propuestas.
Kamala Harris centra su propuesta económica en:
- Reducir el costo de la insulina y de los medicamentos recetados.
- Prohibición federal de la especulación con los precios en los supermercados.
- La construcción de tres millones de nuevas viviendas a bajo precio.
- Un incentivo de hasta $50,000 para pequeños negocios.
Donald Trump centra su propuesta económica en:
- Reducir los precios de la energía aumentando la producción nacional.
- Imposición de aranceles contra países aliados y no aliados.
- Recortar la tasa de impuestos corporativos del 21 % actual al 15 %.
- Llevar a cabo la operación de deportación interna más grande en la historia del país.
Medite por un momento y pregúntese: ¿Qué propuestas le beneficiarán a su familia y a su comunidad?, ¿Cuáles de estas propuestas son realistas?, ¿Qué consecuencias pueden acarrear estas propuestas?
Como votantes tenemos la obligación de ir más allá de los encantos del mercadeo político, los asesores de imagen y las discusiones en las redes sociales, necesitamos elegir una persona centrada en valores, con ideas claras y prácticas que puedan liderar a este país hacia un mañana más equitativo y justo para todos.
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