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El cambio climático ha traído consigo un aumento alarmante en las temperaturas globales, y con ello, el incremento de olas de calor que afectan a diferentes regiones del planeta. Estos eventos extremos de calor representan una amenaza significativa para la salud, y desencadenan una serie de riesgos que no pueden ignorarse.

A pesar de que algunas personas son más vulnerables que otras, en general los efectos del clima pueden ser devastadores. Adultos mayores y niños, así como quienes sufren de enfermedades crónicas, pueden ser los que más sufren por las inclemencias de las temperaturas.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, CDC, listan al menos 5 enfermedades asociadas con el calor. Aunque no necesariamente son enfermedades, representan un peligro para el correcto funcionamiento del organismo. Algunas de estas situaciones son incluso mortales cuando el paciente no recibe atención médica de inmediato.

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Ola de calor: ¿cuáles son sus síntomas?

Un golpe de calor es la consecuencia más grave que puede sufrir una persona cuando se expone a temperaturas elevadas. Por eso es importante conocer algunos síntomas de alerta:

  • Alta temperatura corporal (103 °F o más o desde 39 grados Celsius).
  • Piel caliente, enrojecida, seca o húmeda.
  • Pulso acelerado y fuerte.
  • Dolor de cabeza.
  • Mareos.
  • Náuseas.
  • Confusión.
  • Pérdida del conocimiento llegando hasta desmayos.

Si experimenta estos síntomas en medio de una ola de calor, se recomienda llamar al 911 de inmediato, ya que un golpe de calor representa una emergencia médica. Mientras llega la ayuda, no se recomienda beber líquidos, pero sí tratar de bajar la temperatura con baños de agua fría.

Agotamiento por calor, a un paso de una emergencia

Antes de un golpe de calor, las personas pueden experimentar algo similar que anticipa que si no se toman las precauciones se puede llegar a una situación grave. Los síntomas de agotamiento por calor son:

  • Sudor abundante.
  • Piel fría, pálida, húmeda y pegajosa.
  • Pulso rápido y débil.
  • Náuseas o vómitos.
  • Calambres musculares.
  • Cansancio o debilidad.
  • Mareos.
  • Dolor de cabeza.
  • Desmayos.

¿Qué hacer en estos casos? Lo mejor es mantenerse en un lugar fresco, aflojarse la ropa y colocarse paños húmedos en el cuerpo para evitar que se suba la temperatura. También es ideal tomar sorbos de agua, pero no en cantidades excesivas.

Si estos síntomas empeoran luego de un período de una hora y se experimentan vómitos, es momento de buscar atención médica.

Calambres por calor

El calor puede ocasionar dos síntomas menores como:

  • Sudor abundante, sobretodo durante ejercicios físicos intensos.
  • Dolor o espasmos musculares.

Las soluciones que ofrecen los CDC son:

  • Suspenda todo tipo de actividad física y vaya a un lugar fresco.
  • Beba agua o una bebida deportiva.
  • Espere que los calambres desaparezcan antes de realizar más actividades físicas.

La gravedad de los calambres se identifica si éstos duran más de una hora, lo que obliga a buscar atención médica. Las personas que llevan una dieta baja en sodio o tienen problemas cardiacos, son propensas a presentar cuadros de gravedad, por lo que se recomienda que no esperen mucho tiempo antes de ir a urgencias.

Quemaduras solares

Exponerse al sol o a lugares muy calurosos por largo tiempo, puede ocasionar quemaduras que se caracterizan por generar:

  • Piel dolorida, enrojecida y tibia.
  • Ampollas en la piel.

En medio de olas de calor no se recomienda la exposición prolongada a altas temperaturas. Sin embargo, si es necesario y llega a presentar quemaduras se sugiere:

  • Evite el sol hasta que se le cure la quemadura.
  • Aplíquese paños fríos en las áreas quemadas por el sol o dese un baño con agua fría.
  • Aplique loción humectante a las áreas quemadas.
  • No rompa las ampollas.

Sarpullido por calor

El sarpullido se presenta como grupos de pequeñas ampollas rojas que parecen granitos en la piel (generalmente en el cuello, el pecho, la ingle o en los pliegues de los codos).

¿Cómo actuar?

  • Quédese en un lugar fresco y seco.
  • Mantenga el sarpullido seco.
  • Use talco (como talco para bebés) para calmar el sarpullido.

Lic. en Comunicación Social. MBA en Mercadeo. CEO de Link BTL. Disfruto de leer y escribir. Soy madre y esposa agradecida con la vida. jgimenez@lanoticia.com