Translate with AI to

La escasez de enfermeras en Carolina del Norte es preocupante, pero ya lo era desde antes de la pandemia COVID-19.

Y, por si fuera poco, nuevos datos muestran que la escasez podría empeorar en los próximos años.

El proyecto NC Nursecast se realizó en conjunto entre numerosos grupos de salud, incluidos investigadores de la Universidad de Carolina del Norte.

La parte preocupante es que debido a que el proyecto lleva años en desarrollo, el "efecto COVID" ni siquiera se tiene en cuenta.

Según el análisis, los números prepandémicos proyectaban una escasez de alrededor de 12,000 enfermeras para 2033.

Los investigadores explicaron que saben que variables como el estrés, los problemas de las vacunas y el deseo de un salario más alto son factores que influyen para que las enfermeras se alejen de la fuerza laboral.

Por lo que esos factores podrían aumentar los números arrojados significativamente.

“Si las enfermeras se jubilan o dejan la fuerza laboral incluso solo cinco años antes de lo que lo hubieran hecho, eso nos lleva a 21,000 enfermeras”, dijo Erin Fraher, subdirectora del Centro Sheps de Servicios de Salud de la UNC.

Los investigadores dicen que, si bien las perspectivas no son buenas, creen que esta herramienta Nursecast es clave.

Dicen que, aunque el flujo de educación es importante, la clave para cambiar esto radica en mantener felices a las enfermeras existentes y convencer a las que se han ido de que regresen.

MÁS NOTICIAS RELACIONADAS:

Preocupante escasez de enfermeras en Carolina del Norte: ¿cuál es la razón?

“El miedo siempre está”: La reivindicación de las enfermeras en la pandemia