La pandemia provocó que el consumo de alcohol se incrementara considerablemente en Carolina del Norte.
Pero los ciudadanos del estado consideran que hay otro factor que ha ayudado a ello.
GreenhouseTreatment.com, un proveedor de tratamiento de adicciones, realizó una encuesta a 3,000 bebedores del estado.
El sondeo reveló que más de 1 de cada 4, es decir, el 26 % de habitantes de Carolina del Norte creen que los precios bajos de las bebidas alcohólicas contribuyen a los problemas con la bebida en su comunidad.
Este problema puede ser una preocupación particular durante la pandemia.
Otros detonantes del alto consumo de alcohol
Sobre todo, considerando que muchas personas se han enfrentado a desafiantes ajustes en la vida.
Entre ellas, desgaste económico y dificultades emocionales como resultado del coronavirus.
El estrés, el aburrimiento y el aislamiento son posibles desencadenantes emocionales del consumo de alcohol.
Sensaciones comunes que muchos experimentan debido al distanciamiento social y las regulaciones de encierro.
Combinado con los bajos precios del alcohol, como las ventas en línea y los descuentos en la tienda, esto podría ser una receta fatal para las personas vulnerables.
Desglosados en todo el país, los habitantes de Arkansas tienen los sentimientos más fuertes sobre los bajos precios del alcohol que contribuyen a los problemas con la bebida en su comunidad.
El 50 % de ellos dice que siente que este es el caso.
Comparativamente, solo el 10 % de las personas en las zonas rurales de Wyoming piensan que el licor de bajo costo es un factor contribuyente.
Otra postura
La encuesta también encontró que el 68 % de los encuestados piensan que las bebidas no alcohólicas son demasiado caras.
Esta podría ser otra razón por la que algunos sienten que los precios bajos de las bebidas alcohólicas están contribuyendo negativamente al problema de la bebida en su comunidad.
Quizás más personas se inclinarían a pedir alternativas sin alcohol si hubiera menos discrepancia de precios entre sus contrapartes alcohólicas.
El 36 % de personas encuestadas consideran que el alcohol es parte de su compra semanal; lo que podría sugerir que el bajo costo lo hace más asequible para el consumo regular si algunos lo consumen semanalmente.
Además, el 18 % de los encuestados dice que compra alcohol al por mayor para ahorrar dinero.
Por último, la investigación reveló que más de 1 de cada 10, es decir, el 16 % de bebedores admiten haber comprado alcohol en la tienda simplemente porque había una oferta especial.
Incluso si no tenían intención de comprarlo antes de llegar.