La administración del presidente Joe Biden está preparando una serie de medidas para que el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) frene buena parte de sus arrestos y deportaciones, a fin de enfocarse exclusivamente en criminales peligrosos, según documentos enviados a altos funcionarios de la entidad.
De acuerdo con memorandos y correos electrónicos internos de ICE obtenidos por The Washington Post, se ordenará a los agentes que ya no busquen deportar a inmigrantes por delitos como conducir bajo la influencia del alcohol (DUI) o asalto, y se concentren en amenazas a la seguridad nacional, cruces fronterizos recientes, y personas que completen condenas de prisión por delitos graves.
“Generalmente, estas condenas no incluirían delitos relacionados con drogas (delitos menos graves), asalto simple, DUI, lavado de dinero, delitos contra la propiedad, fraude, delitos fiscales, o cargos sin condena”, dijo el director interino Tae Johnson a altos funcionarios en un correo electrónico del 4 de febrero, según por The Washington Post.
ICE politizado por Trump
Estas medidas buscarían reorientar al ICE, una agencia que fue ampliamente politizada durante la administración Trump.
Del 2017 al 2020 la entidad fue presionada para subir los números de inmigrantes detenidos, lo que generó múltiples “arrestos colaterales” de indocumentados que no tenían antecedentes criminales por parte de sus agentes.
Adicionalmente la agencia invirtió grandes cantidades de dinero y tiempo en montar campañas de desprestigio en contra de alguaciles de Carolina del Norte que optaron por no colaborar con ICE.
En condados como Mecklenburg y Buncombe la agencia federal incluso gastó dinero público en vallas publicitarias; atacando las políticas de no colaboración de sus alguaciles.
Agentes se oponen a solo enfocarse en criminales
Estas medias han generado malestar en algunos funcionarios del ICE, según The Washington Post; pues afirmaron que los cambios propuestos quitarán la discreción de los agentes y limitarán severamente su capacidad para arrestar y deportar indocumentados.
De momento el borrador de las directrices está en manos del nuevo secretario del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), Alejandro Mayorkas.
¿Quiénes enfrentan arrestos y deportaciones?
Los funcionarios de ICE aclaran está presente la posibilidad de arresto para cualquier persona con presencia ilegal en Estados Unidos. Faltas como los delitos sexuales siguen siendo una prioridad absoluta, dijeron.
Los inmigrantes deben ser criminales o amenazas a la seguridad pública para los arrestos y deportaciones; si tienen un historial de comportamiento violento, afiliaciones a pandillas bien documentadas; o condenas por delitos graves agravados; como: asesinato, violación, abuso infantil y delitos graves relacionados con las drogas; escribió Johnson.
En los casos en que el delito agravado tenga más de 10 años y no sea el motivo de un arresto reciente; esa persona no se consideraría una amenaza para la seguridad pública; agregó el funcionario según The Washington Post.