Las fuertes lluvias registradas en Tennessee han ocasionado que al menos 22 personas murieran por los deslaves e inundaciones sin precedentes en esta zona.
Los equipos de rescate examinaron casas destrozadas y escombros en busca de decenas de personas desaparecidas, y al momento se registran al menos 22 víctimas mortales; aunque se teme que el numero pueda crecer en las próximas horas.
Las inundaciones en las áreas rurales destruyeron carreteras, torres de telefonía celular y líneas telefónicas, dejando a las familias sin saber si sus seres queridos sobrevivieron al diluvio sin precedentes.
Hasta 17 pulgadas (43 centímetros) de lluvia cayeron en el condado en menos de 24 horas el sábado, pareciendo romper el récord de Tennessee de lluvia en un día en más de 3 pulgadas (8 centímetros), dijo el Servicio Meteorológico Nacional.
El gobernador de Tennessee, Bill Lee, recorrió la zona y se detuvo en Main Street en Waverly, donde algunas casas fueron arrancadas de sus cimientos y la gente estaba escudriñando sus posesiones anegadas.
La página de Facebook de la oficina del alguacil del condado de Humphrey se llenó de personas en busca de familiares y amigos desaparecidos. Las páginas de GoFundMe se hicieron pidiendo ayuda para los gastos del funeral de los muertos, incluidos los gemelos de 7 meses que fueron arrancados de los brazos de su padre mientras intentaban escapar.
El problema de las lluvias no se limita a Tennessee. Un estudio federal encontró que el cambio climático provocado por el hombre duplica las posibilidades de los tipos de aguaceros fuertes que en agosto de 2016 arrojaron 26 pulgadas (66 centímetros) de lluvia alrededor de Baton Rouge, Louisiana. Esas inundaciones mataron al menos a 13 personas y dañaron 150,000 hogares.