La Iglesia de Polonia, en voz de su Conferencia Episcopal, condenó la invasión de Rusia a territorio de Ucrania, a diferencia de la postura silenciosa del Papa Francisco y el Vaticano.
El arzobispo polaco, Stanislaw Gądecki, mandó una carta al líder de la Iglesia ortodoxa de Rusia, Cirilo I, para interceder ante Vladimir Putin.
'Llegará el momento de resolver estos crímenes, incluso ante cortes internacionales. Sin embargo, aunque alguien consiga esquivar la justicia humana, hay un tribunal que no se puede evitar', dice la carta.
La condena de la Iglesia de Polonia al ataque de Rusia contrasta con la relativa neutralidad del Vaticano y el Papa Francisco.
El Vaticano hizo un llamado a la paz, pidió corredores humanitarios, un alto el fuego y el regreso a las negociaciones, e incluso se ha ofrecido para mediar.
Pero ni Francisco ni la Santa Sede han condenado la actitud bélica de Rusia y su presidente, Vladimir Putin, ante Ucrania.
Esto se vuelve aún más notorio al recordar que Francisco ha sido un papa que en el pasado condenó las armas nucleares.
El Vaticano tiene una larga tradición de diplomacia silenciosa ya que considera que puede facilitar mejor el diálogo si no toma partido ni condena públicamente a los agresores.
Este ha sido el argumento con el que por años han defendido la actitud de Pío XII, que ha sido señalado por grupos de judíos por no condenar de manera más enérgica el Holocausto en la Segunda Guerra Mundial.
El Vaticano dijo que su forma de hacer diplomacia salvó muchas vidas entonces y lo siguió haciendo durante la Guerra Fría.
El Vaticano y la postura de la iglesia ante la invasión de Rusia a Ucrania
El Papa Francisco visitó la misión diplomática rusa en el Vaticano la semana pasada.
Y también ha sostenido llamadas telefónicas con el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski.
Ucrania es un país con una mayoría de creyentes ortodoxos y solo unos pocos millones de católicos.
Francisco no ha ocultado su deseo de mejorar aún más su relación con Cirilo I, cabeza de la Iglesia Ortodoxa.
Cirilo y Francisco tuvieron una histórica reunión en 2016, la primera entre un papa y un patriarca ruso en un milenio.

El arzobispo Gadecki fue mucho más incisivo que la Santa Sede en su petición a Cirilo.
'Le pido, hermano, que inste a Vladimir Putin a que detenga la guerra sin sentido contra el pueblo ucraniano. Le pido de la forma más humilde que pida la retirada de las tropas rusas del estado soberano que es Ucrania', añadió Gadecki en su misiva a Cirilo.