Un movimiento de aficionados al club Irapuato, podría afectar a la Selección de México y evitar que vaya al Mundial de Qatar 2022.
La historia tiene varias ramificaciones, pero todo ha confluido para un auténtico caldo de cultivo para una posible sanción de FIFA.
Para empezar, hay que recordar que el equipo mexicano está sancionado y bajo la lupa de la Federación Internacional de Futbol Asociado, por el grito homofóbico "put...", el cual se ha buscado erradicar desde hace varios años.
Las sanciones que ha puesto el organismo han sido monetarios principalmente, incluso se ha pactado que algunos partidos sean sin público.
La Federación Mexicana de Futbol, ha hecho intensas campañas para buscar erradicar esta conducta, aunque con un éxito muy cuestionable; pues en ocasiones se deja de escuchar en los partidos, pero en otros regresa.
El castigo puede ser alto si el grito en las tribunas se mantiene, incluso se podría llegar al veto del Mundial.
Irapuato amenaza a dejar a México sin Mundial de futbol
El equipo de futbol Irapuato, fue considerado para ser parte de la Liga de Expansión, incluso en lo deportivo ganaron el título de Segunda División; sin embargo, la FMF negó el ascenso por no cumplir con los requerimientos solicitados.
Esto no fue tomado bien por aficionados, dueños del equipo e incluso el gobierno del estado criticó la decisión de la máxima instancia del balompié mexicano.
Esto derivó que varios grupos de aficionados de la Trinca Fresera decidieran tomar acciones y están dispuestos a hacer un boicot a la FMF.
Y la amenaza es clara, convocar a los aficionados al club y de otros equipos a lanzar el grito homofóbico en los próximos partidos de la Selección Mexicana, esto con el fin de que lleguen los castigos de la FIFA para que el Tri no vaya al Mundial.
Los fans de los freseros han dejado en claro que en México y Estados Unidos hay mucha gente de Irapuato que está sumándose a la iniciativa; incluso grupos de animación y aficionados de otras partes de la República Mexicana están apoyando la medida.
Esto también obedece a que sienten que por intereses económicos se afecta a los aficionados; pues decenas de equipos han cambiado de sede y dueño a lo largo de los años, sin importar lo que la gente de la localidad quiera.
Y cabe destacar que los mismos aficionados habían lanzado una convocatoria previa para evitar el mismo grito, pero ahora quieren usarlo como presión.
Ahora habrá que ver si en los próximos partidos que se realicen con público, el llamado de los aficionados del Irapuato tiene el eco suficiente para que el boicot funcione.