En los últimos años las casas de apuesta han ido ganando un protagonismo “peligroso” en los diferentes deportes a nivel mundial.
La incursión de la NFL a Las Vegas generó una gran cantidad de dudas justamente por la guerra de intereses que se podrían suscitar, pero el primer golpe ha llegado en la Costa Este.
El receptor abierto de los Atlanta Falcons, Calvin Ridley, fue suspendido durante toda la temporada 2022 por romper los protocolos y apostar en juegos de la NFL.
Una investigación de la liga arrojó que Ridley realizó apuestas de su equipo el pasado mes de noviembre, aunque especificaron que no utilizó información especial en torno a la franquicia.
“No hay nada más fundamental para el éxito de la NFL, y para la reputación de todos los asociados con nuestra liga, que defender la integridad del juego”, señala el Comisionado Roger Goodell.
“Esta es la responsabilidad de cada jugador, entrenador, propietario, oficial del juego y cualquier otra persona. Sus acciones pusieron en riesgo la integridad del juego, amenazaron con dañar la confianza del público en la NFL”, añadió.
Goodell especificó que “durante décadas, apostar en los juegos de la NFL se ha considerado una de las violaciones más importantes de la política de la liga que justifica la sanción más importante”.
Ridley admitió su responsabilidad y de momento no podrá volver a jugar un partido hasta la temporada 2023.
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El WR solamente disputó cinco partidos en la última campaña antes de alejarse del equipo para tratarse de problemas emocionales.
Desde su llegada a la NFL en 2018, Ridley se ha consolidado como uno de los mejores jugadores en su posición. En 49 partidos acumuló 248 recepciones para 3,342 yardas y 28 touchdowns.