Un comunicado de prensa enviado este domingo por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA), anuncia que el gobierno estadounidense autoriza un tratamiento con plasma para el nuevo coronavirus.
Se trata de una autorización de uso de emergencia (EUA) del llamado "plasma convaleciente", que se encuentra en investigación para el tratamiento del COVID-19. Su aplicación será en pacientes hospitalizados.
"Con base en la evidencia científica disponible, la FDA concluyó, como se describe en su memorando de decisión, que este producto puede ser eficaz para tratar COVID-19 y que los beneficios conocidos y potenciales del producto superan sus riesgos conocidos y potenciales", resalta el comunicado. Y agrega que "los ensayos clínicos para demostrar definitivamente la seguridad y la eficacia continúan".
Coronavirus y reelección
En vísperas de la Convención Nacional Republicana 2020, y con las encuestas en su contra, este anuncio busca mostrar que la administración Trump está preocupada por la situación sanitaria del país, en donde se contabilizan 175.000 muertos. La Casa Blanca ha invertido vastos recursos en un proceso acelerado para desarrollar una vacuna. Los asesores de Trump apuestan a que será una "sorpresa de octubre" que podría ayudar al presidente a recuperar terreno en las encuestas.
"La autorización de emergencia de la FDA para el plasma convaleciente es un logro histórico en los esfuerzos del presidente Trump para salvar vidas del COVID-19", dijo en el comunicado que autoriza el medicamento el secretario de Salud y Servicios Humanos Alex Azar.
Sobre el plasma
El plasma sanguíneo, tomado de pacientes que se han recuperado del coronavirus y es rico en anticuerpos, puede brindar beneficios a quienes luchan contra la enfermedad. Pero la evidencia no ha sido concluyente en cuanto a cómo funciona o cuál es la mejor forma de administrarlo.
Muchos científicos y médicos creen que el plasma convaleciente podría proporcionar algún beneficio, pero está lejos de ser un gran avance. Es rico en anticuerpos que podrían ser útiles para combatir el coronavirus, pero la evidencia hasta ahora no ha sido concluyente sobre si funciona, cuándo administrarlo y qué dosis se necesita.
Más de 70.000 pacientes ya han sido suministrados con plasma de convalecencia. Se trata de un enfoque centenario para combatir la gripe y el sarampión antes de las vacunas. Es una táctica a la que recurrir cuando aparecen nuevas enfermedades, y la historia sugiere que funciona contra algunas, pero no todas, las infecciones.