La Corte Suprema se prepara para escuchar este miércoles 7 de diciembre los argumentos del llamado caso de Carolina del Norte, luego de que los republicanos impugnaran la decisión de anular el mapa electoral que ellos habían trazado de cara a las elecciones intermedias.
El bloqueo legal se fundamentó en que los republicanos habían trazado distritos congresuales fuertemente a su favor. Una mayoría demócrata en la Corte Suprema del estado consideró que el mapa del Partido Republicano violaba la constitución de Carolina del Norte.
Con la anulación se aplicó un mapa de reemplazo, en el que cada partido quedó con siete escaños que convirtieron al estado en el más decisivo y competido para las elecciones de medio término del 8 de noviembre. Pero los republicanos no quedaron satisfechos y con su líder Tim Moore, presidente de la Cámara de Representantes del estado, apelaron a un llamado que podría ser histórico.
¿De qué trata el caso electoral de Carolina del Norte ante la Corte Suprema?
El caso se basa en la impugnación de la decisión de la Corte Suprema bajo la teoría de la "legislatura estatal independiente", donde se pide a los jueces decidir si amplía drásticamente la autoridad que tienen las legislaturas estatales sobre los mapas electorales y las leyes de votación.
Los líderes republicanos de la legislatura de Carolina del Norte dijeron a la Corte Suprema que las “líneas cuidadosamente trazadas de la Constitución ponen la regulación de las elecciones federales en manos de las legislaturas estatales, del Congreso y de nadie más”.
La cuestión para los jueces es si la disposición de la Constitución de Estados Unidos que otorga a las legislaturas estatales el poder de establecer las normas sobre “tiempos, lugares y formas” de las elecciones al Congreso excluye a los tribunales estatales del proceso.
¿Por qué es tan importante el resultado de este caso?
“Este es el caso más importante sobre la democracia estadounidense ––y para la democracia estadounidense–– en la historia de la nación”, dijo el ex juez federal Michael Luttig, un prominente conservador que se ha unido al equipo legal que defiende la decisión del tribunal de Carolina del Norte.
El fallo a favor del caso Moore v. Harper, iría más allá de una simple redistribución de distritos. Podría aumentar significativamente el poder de los legisladores estatales sobre las elecciones al Congreso y a la presidencia. En un sentido amplio, incidiría en la ley electoral. El impacto se vería tan pronto como en las próximas elecciones presidenciales del 2024.
El fallo más contundente para los republicanos de Carolina del Norte podría socavar más de 170 disposiciones constitucionales estatales, más de 650 leyes estatales que delegan la autoridad para hacer políticas electorales a los funcionarios estatales y locales, y miles de regulaciones hasta la ubicación de los centros de votación, según el Centro Brennan para la Justicia de la Facultad de Derecho de la Universidad de Nueva York.
Desarrollado por La Noticia con información de The Associated Press.