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Martina Espino Trejo ha trabajado como mesera en una cafetería por cinco años, a principios de enero, en el auge de casos de Omicron en la comunidad latina, Espino Trejo se vio directamente afectada por la enfermedad.

“Me dio fiebre, temperatura, y dolor de garganta,” explica Martina. Después de notar que los síntomas empezaron a empeorar, Martina decidió notificar a su jefe y hacerse la prueba para estar segura que tenía la enfermedad, y salió positiva. 

“Mi jefe me notificó y me dio una carta donde decía que ya que yo estoy vacunada podía tomarme de 3 a 5 días en casa dependiendo mis síntomas,” explica Espino Trejo. Ella decidió tomar los 5 días recomendados y notificó a su jefe, quien le dijo a mediados de semana que la compañía ya no está pagando licencia por enfermedad por COVID. 

Las noticias empezaron a preocupar a Espino Trejo ya que ella vive en base a su salario semanal, y todo el mundo en casa estaba enfermo, incluyendo su novio con el cual comparte gastos, “mi novio y yo no estábamos los dos en lo mismo, que no estábamos ganando nada; y prácticamente mis hijos también estaban encerrados porque no sabíamos si lo tenían o no; y pues esa semana no teníamos entrada de dinero.”

Omicron causa inestabilidad económica para personas que ganan salario mínimo

En diciembre del 2021, la comunidad latina experimentó un enorme incremento de casos de COVID-19 debido a la variante omicron, que ha probado ser sumamente contagiosa. Las comunidades latinas y afroamericanas han sufrido el mayor impacto económico durante la pandemia; y esta nueva variante ha definitivamente exacerbado la inestabilidad económica en estas comunidades. Especialmente para personas que no son asalariados, o ganan por hora

Espino Trejo decidió tomar los días libres por el bienestar de su salud y la de su familia; y para evitar contagiar a las personas en su trabajo. Sin embargo, ella conoce colegas y personas cercanas que no pueden perder una semana de trabajo; y ya que para muchos que tienen las vacunas los síntomas son semejantes a los de una gripe común, deciden no decir nada y seguir atendiendo al trabajo. 

Cynthia Snider, doctora de enfermedades infecciosas en Cone Health, asegura que ir a trabajar con omicron; y no tomar los cinco días recomendados de aislamiento ha contribuido a la propagación del virus en la comunidad.

“antes de los cinco días todavía se es considerado peligro de contagio, y las medidas claves son utilizar una mascarilla, o trabajar desde casa, y no estar alrededor de otras personas. Trabajar mientras positivo con COVID se considera alto riesgo,” explica Snider. 

Cynthia Snider

Sin embargo, muchos están batallando con la presión financiera de la pandemia. Yazmin García Rico, la directora de Política y Estrategia para Latinos en el Departamento de Salud y Servicios Humanos de Carolina del Norte dice que no hay recursos disponibles para personas que tengan que tomar días libres; ni siquiera para los que necesiten vacunarse. 

“No estoy consciente de alguna agencia que esté ayudando o apoyando a las personas que tengan que tomar días libres,” explica García Rico. “Si animamos a empleadores que ayuden a sus empleados en situaciones de emergencia, pero no hay una ayuda estatal o federal que yo esté consciente de, actualmente.” 

Las secciones de trabajo con la concentración más alta de trabajadores latinos incluyen agricultura, pesca, y silvicultura; mantenimiento y limpieza; construcción; y preparación de comida, servicios alimenticios

Según reportes, Craig Richardson, Profesor Universitario en Winston-Salem State University, estas industrias han sido entre las que han sufrido mayor impacto por COVID-19.

“Los empleados que ganan por hora, o ganan un salario mínimo, están en desventaja en comparación, ya que la mayoría tienen menos de $400 en el banco para emergencias,” explica Richardson. “Lo cual significa que en caso de urgencias, van a perder todos sus ahorros.”

Para personas como Espino Trejo que trabajan en la industria de servicio, el volver a finales de los cinco días es imperativo para sus finanzas; pero no ha sido la mejor decisión para su salud. Martina aún no se ha recuperado completamente; y aún tiene migrañas. Ella explica que su familia aún se está recuperando después de perder una semana de trabajo, pero que su salud es prioridad.

La semana de enero 9 se reportaron 21,690 casos de COVID-19 en la comunidad latina; y desde entonces los casos de COVID-19 han ido decayendo; con solo 2,351 casos en la comunidad latina en Carolina del Norte en la semana de febrero 16.

Periodista de La Noticia y 88.5 WFDD, Eileen Rodríguez reporta el impacto de COVID-19 en la comunidad Latina en Carolina del Norte. Rodríguez es miembro del cuerpo de periodistas de Report for America...