Los pavos están destinados a ser el centro de atención en la mesa durante la cena del Día de Acción de Gracias. Pero algunos tienen la suerte de encontrar un nuevo hogar y propósito, lejos del asador y más cerca de una vida tranquila y cuidada. Esto, gracias a la tradición del indulto del pavo.
La tradición del perdón presidencial tiene una gran historia detrás. Aunque se dice que en Estados Unidos se comen más de 200 millones de pavos en Thanksgiving, en el fondo el indulto resalta la importancia de tratar a los animales con compasión y respeto en todas las circunstancias.
¿Qué es el perdón o el indulto al pavo?
El Día de Acción de Gracias en Estados Unidos es una festividad que tradicionalmente se celebra con un suculento banquete en el que el pavo asado se lleva el papel protagónico. Sin embargo, desde hace varias décadas, existe otra costumbre: el perdón oficial a un par de pavos seleccionados, salvándolos de convertirse en el plato principal de la cena.
El "perdón del pavo" es un acto a cargo del presidente de la nación, en la que simbólicamente "indulta" a las aves de ser sacrificadas. Es simbólico debido a que es un gesto que agrega un toque de ligereza y compasión a la celebración del Día de Acción de Gracias.
La ceremonia de indulto tiene lugar en la Casa Blanca. Suele ser un acto informal y a menudo jocoso; después de todo se están salvando de la amenaza del horno, al menos por esos días.
¿Desde cuándo se otorga perdón a los pavos?
El indulto a los pavos no se convirtió en una tradición de buenas a primeras. Según la propia Casa Blanca, todo comenzó desde la década de 1870, con los pavos que recibían algunos presidentes como obsequio en Acción de Gracias. A partir de 1914 las decoraciones asociadas a los pavos que llegaban como regalo, convirtió el acto en un "símbolo nacional de buen humor".
En 1947, el presidente Harry Truman se convirtió en el primer jefe de Estado en aceptar el regalo de un pavo de la Fundación Nacional del Pavo, lo que lo convirtió históricamente en el precursor del indulto, aunque en ese momento el animal no recibió el perdón.
Entonces, realmente fue John F. Kennedy (1961-1963) el primero que perdonó a un pavo desde su residencia presidencial. Sin embargo, esta no fue una tradición que se mantuvo de manera formal, hasta que el presidente George Bush, en 1989, convirtió la costumbre en un evento anual.
¿Qué pasa con los pavos que el presidente indulta para no ser la cena de Thanksgiving?
Una vez que el presidente otorga el perdón a los afortunados pavos, comienza una nueva fase en sus vidas y pasan al retiro en una granja o parque.
Estas aves, a las cuales les ponen nombres peculiares o extravagantes, se alejan de la posibilidad de convertirse en el plato principal de una cena festiva. En su lugar, los envían a lugares donde son cuidados y mimados, y en ocasiones pueden participar en eventos públicos o actividades educativas.
¿Esto va contra la tradición del Día de Acción de Gracias?
A primera vista, perdonar pavos puede parecer un acto que va en contra de la esencia misma del Día de Acción de Gracias, donde la tradición dicta un festín centrado en este emblemático ave. Sin embargo, la decisión presidencial de indultar a los pavos no pretende desafiar la tradición, sino más bien añadir la compasión al evento.
En realidad, la ceremonia del perdón presidencial de pavos se ha convertido en una tradición dentro de la tradición, sumando un elemento de entretenimiento y humanidad.
Joe Biden perdonó un par de pavos que presentaron en la Casa Blanca
Este 2023, los pavos Libertad y Campana (nombrados en honor a la Campana de la Libertad), recibieron el perdón por parte del presidente Joe Biden.
Son dos machos de cuatro meses, cubiertos de plumas impecablemente blancas. Pesan unos veinte kilos cada uno, pero no serán la cena de alguna familia este año. Vinieron de una granja en la localidad de Willmar, en Minnesota. Ahora, la Federación Nacional del Pavo dijo que volverán a estado de origen. La Facultad de Alimentación y Ciencias Agrícolas y de los Recursos Naturales de la Universidad de Minnesota, los tendrán en granjas hsta el final de sus días.