Charlotte - Miembros de la comunidad y familiares de un joven latino que murió a manos de un policía encubierto, participaron en una vigilia y pidieron a testigos del incidente que den su versión de los hechos.
Según el Departamento de Policía de Charlotte-Mecklenburg (CMPD) Josué Javier Díaz, de 28 años, fue baleado luego de él disparara un arma calibre 22 en contra del detective.
El incidente ocurrió a la 1:18 p.m. del jueves 26 de enero en Albemarle Road, cuando una camioneta en la que viajaban Díaz y un amigo suyo, golpeó un costado de un vehículo donde viajaba el policía encubierto que estaba parado en el tráfico. Díaz quien iba manejando huyó de la escena y el detective lo siguió mientras notificaba al departamento de comunicaciones del CMPD y solicitaba asistencia de una patrulla.
“Mientras el policía notificaba, el sospechoso paró su vehículo frente al auto del detective. El sospechoso salió de su vehículo y mostró un arma. El detective percibió una inminente amenaza y disparó contra el sospechoso”, indicó un comunicado del CMPD.
La policía aseguró un día después del incidente, que los investigadores recuperaron el arma y la bala, la cual dejó un hoyo en el vehículo policial.
Piden información de posibles testigos
El viernes 27 de enero un centenar de personas entre activistas, familiares y amigos de Díaz, se congregaron en una emotiva vigilia cerca del lugar donde ocurrió el tiroteo.
“Lo que le pasó a mi hijo fue una grave injusticia”, dijo Doris Loza, madre del joven. “Yo sé que hubo muchas personas que hicieron videos, y la verdad saldrá a la luz”, señaló la madre.
Juan José Silverio, quien contó que iba con Díaz en la camioneta, afirmó que el joven se aproximó al vehículo del detective para disculparse luego de chocarlo, y que se bajó sin el arma la cual estaba guardada en la guantera.
Al respecto Corin Mack, presidenta del capítulo local de la Asociación Nacional para el Avance de la Gente de Color (NAACP), dijo que la organización está mirando el caso. “Queremos tener la verdad”, enfatizó.
Lo asocian con una pandilla
La muerte de Díaz ha causado controversia, debido a las fotografías que el joven publicaba en su perfil de Facebook, donde aparece portando armas y mostrando tatuajes asociados con una conocida pandilla.
Su hermana, Ada Martínez, dijo que su hermano era un buen padre, y que los reportes que dicen que era miembro de la pandilla Sur-13 no son ciertos. “La gente dice eso porque nació en California, a él le gustaban las armas y tenía permiso para usarlas” aseguró Martínez.
El domingo 29 de enero se realizó un servicio religioso para recordar a Josué, en la Iglesia Adventista Del Séptimo Día Hispana Central de Charlotte, a donde acudieron más de 250 personas.
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