Un mecánico del condado de Randolph, en Carolina del Norte, ganó la mitad de un premio mayor con algo más de suerte.
Gregory Warren, originario de Frankinville, se hizo acreedor de la cantidad de $195,935 gracias a un boleto de la lotería que compró, y que por un momento olvidó.
Warren narró que paró por gasolina después del trabajo y compró un boleto por “casualidad”.
“No compro boletos de lotería muy a menudo. Da la casualidad de que elegí un buen día para comprar uno", señaló el ganador.
Warren compró el boleto el pasado miércoles 29 de septiembre en la BP en la US 64 East en Asheboro.
Pero fue hasta el 4 de octubre, es decir 5 días después, cuando recordó que necesitaba verificar los números de su boleto.
"Me olvidé de eso. Todavía estoy un poco sorprendido. No pude dormir mucho anoche. ¡Demasiada emoción!”, explicó.
En total fueron dos los boletos que se llevaron el premio mayor de $391,970, el cual fue dividido.
Tras el paso de impuestos federales y estatales, en total Warren se llevó a casa $138,624.
Warren explicó en qué desea utilizar el premio: “Creo que me voy a dedicar a mi propio negocio”.
“Tengo un hijo de 14 años y quiero poner en marcha un negocio para que él tenga algo que hacer cuando se gradúe de la escuela secundaria", agregó.
La otra mitad del premio se lo llevó una mujer originaria de New Bern.
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