Febrero concluyó como un mes con cifras alentadoras en la lucha contra el COVID-19 en Carolina del Norte: menos contagios diarios, menos hospitalizaciones y más vacunas. Esto motivó a las autoridades a dar marcha atrás a algunas de medidas para contener el coronavirus. Sin embargo, algunos temen que fue algo prematuro quitar estas restricciones. ¿Qué hay de cierto?
Dr. Fauci: “Fue prematuro quitar restricciones”
El 26 de febrero Carolina del Norte, Carolina del Sur y Virginia eliminaron ciertas restricciones para contener el nuevo coronavirus, al igual que otros estados como Massachusetts, Arkansas y Wyoming.
Esta flexibilización se produce a pocos días de que Estados Unidos pasara la escalofriante cifra de 500,000 muertes por COVID-19.
En una entrevista realizada el domingo 28 de febrero en el programa “Meet the Press”, el Dr. Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas, consideró que el levantamiento de las restricciones en estados como Carolina del Norte es prematuro.
“Alrededor de una docena de estados, algunos, como Carolina del Norte, permiten a más fanáticos (del deporte) en los graderíos, más bares bajo techos abiertos y cosas como estas”, inquirió Chuck Todd, conductor de ‘Meet the Press’. “¿Por qué dice que esta aún no es la semana para aliviar las restricciones?”, preguntó.
“Es realmente demasiado prematuro en este momento para retroceder demasiado”, dijo el Dr. Fauci.
“Me preocupa que todavía estemos en ese nivel de 70,000 (infecciones por día), y cuando la gente comienza a retirar los métodos de mitigación y las actividades de control, se tiene un riesgo, y es un riesgo real, de ver un retroceso en estas medidas, y no es algo que me esté imaginando. Vuelva atrás y mire las oleadas que hemos tenido durante el año pasado. Siempre fue en un momento en el que se quería retroceder”.
Fin de la segunda ola
Carolina del Norte se encuentra en el lado descendente de la segunda ola de contagio de la pandemia del COVID-19. Esto se debe a múltiples factores, por ejemplo, el frío invernal no permitió muchas actividades sociales, además se ha hecho una expansión en las jornadas de vacunación. Pero todavía no podemos cantar victoria.
Todos estamos hartos de las restricciones y los negocios locales piden a gritos clientes, sin embargo no podemos bajar la guardia. Estadísticamente, es la recta final de un proceso el que puede resultar más peligroso si subestimamos el problema.
Veamos un ejemplo: Hace unos años la compañía de seguros Progressive preguntó a más de 11,000 personas que sufrieron un accidente automovilístico, qué tan lejos de casa estaban cuando ocurrió el choque. El 52 % de los choques ocurrieron dentro de cinco millas de sus casas y el 77 % ocurrieron dentro de las 15 millas previas al destino de los conductores. ¿Por qué ocurre esto?
Un conductor cansado de la jornada o del viaje, comienza a bajar la guardia y pone menos atención a la carretera, porque conoce el camino “de memoria”, siente que ya está en casa, pero lo cierto es que en un momento de descuido, puede ocurrir la tragedia.
No baje la guardia
Si bien Carolina del Norte tiene cifras alentadoras, todos debemos continuar haciendo nuestra parte: use una mascarilla, manténgase a 6 pies de personas que no viven en su casa, lávese constantemente las manos, limite las reuniones con personas fuera de su hogar, hasta que la mayoría de las personas estén vacunadas.
Póngase en cuarentena y hágase la prueba si ha estado expuesto a alguien con coronavirus. Obtenga la vacuna COVID-19 cuando esté disponible para usted. Solo trabajando juntos y permaneciendo vigilantes podremos superar la pandemia.