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Juan Diego Mazuera Arias es un joven que siempre ha sentido una profunda pasión por abogar por los derechos de los inmigrantes latinos. Su historia está llena de desafíos que enfrentó y superó como estudiante indocumentado. Su determinación y esfuerzo le permitieron obtener un título en Ciencias Políticas de Queens University of Charlotte y una maestría en Gestión y Políticas Públicas, Impacto Social, Innovación e Inversión, otorgada por la NYU Robert F. Wagner Graduate School of Public Service.

Juan Diego es el hermano mayor de dos hijos, un rol que considera fundamental para ser un ejemplo de superación para su hermana menor. Emigró con sus padres a la edad de ocho meses, estableciéndose inicialmente en Queens, Nueva York, donde vivieron durante dos años antes de mudarse a Charlotte, Carolina del Norte. La transición no fue fácil, ya que sus padres no dominaban el inglés por completo.

“Mi familia es lo más importante para mí. He visto todos los sacrificios que hicieron por mí. Dejaron todo lo que conocían: su cultura, su familia, todo, para darme una mejor vida”, comenta Juan Diego a La Noticia.

Mi feliz niñez en Estados Unidos”

La niñez de Juan Diego estuvo llena de alegría. Recuerda cómo sus padres siempre hicieron todo lo posible para darle lo que necesitaba y más. No se daba cuenta de que provenían de bajos recursos hasta que comenzó la escuela.

“Mis padres siempre me dieron Navidades inolvidables cada año, excepto un año cuando nos robaron todos mis juguetes. Me puse muy triste. Fue entonces cuando empecé a darme cuenta de que el lugar donde vivíamos no era tan seguro”, comenta.

Aunque sus padres solo hablaban español, Juan Diego comenzó a aprender inglés en la escuela. Esto se convirtió en un obstáculo al principio. Su madre lo ayudaba con sus tareas usando un diccionario, a menudo trabajando juntos hasta altas horas de la noche.

“Recuerdo mi primer día de kínder. Corrí a los brazos de mi madre porque los niños no querían jugar conmigo, ya que no podía hablar inglés. Fue bastante duro porque me di cuenta de que los niños no eran tan buenos como pensaba”, dice.

DACA: Entendiendo el significado de ser indocumentado

Desde pequeño, los padres de Juan Diego le inculcaron la importancia de evitar problemas debido a su estatus migratorio.

“Crecí con la idea de que, si alguien me preguntaba de dónde era, debía decir que de Estados Unidos. En ese entonces, no entendía por qué”, recuerda Juan Diego.

Conforme creció, sus padres lo motivaron a destacar en la escuela. Sin embargo, al comenzar a llenar solicitudes universitarias, descubrió las limitaciones de ser indocumentado.

Aunque obtuvo DACA (Acción Diferida para los Llegados en la Infancia), que le permitió trabajar legalmente, seguía enfrentando incertidumbre y barreras.

“Fue triste cuando mis padres me contaron sobre mi estatus migratorio. Era joven y no entendía por qué no podía asistir a la universidad de mis sueños, UNC-Chapel Hill, a pesar de haber trabajado tan duro”, comenta.

Finalmente, su familia logró un préstamo a través de la Cooperación Latina, lo que le permitió estudiar su primer año en el Central Piedmont Community College. Posteriormente, recibió la beca Golden Door Scholar, tras un intento fallido inicial.

Superando los desafíos como estudiante indocumentado

Ser estudiante indocumentado significó altos costos de matrícula para Juan Diego, quien fue considerado estudiante fuera del estado por tener DACA. Esto lo llevó a buscar becas y apoyos financieros.

“No obtener la beca la primera vez fue traumático, pero intentarlo nuevamente fue la mejor decisión de mi vida. Crecí mucho como persona”, afirma.

Durante sus estudios, descubrió su pasión por abogar por los derechos de la comunidad inmigrante. Decidió cambiar su licenciatura de Administración de Empresas a Ciencias Políticas al observar la falta de representación de los latinos indocumentados.

“Me propuse usar mi voz como inmigrante para que otros se den cuenta de lo que somos capaces de lograr”, asegura.

Inspiración para la comunidad inmigrante latina

Aunque no podía votar, Juan Diego buscó formas de marcar la diferencia. Participó en campañas políticas con Bernie Sanders y Hillary Clinton. Gracias a la beca Golden Door Scholar, pudo financiar sus estudios y participar en estas iniciativas.

“Cubrir los costos no era fácil. Estudiaba tiempo completo y trabajaba en Apple. Cuando compartí mi historia, me ayudaron a cubrir los gastos de mi renovación de DACA y me permitieron trabajar medio tiempo”, comenta.

Juan Diego se dedica a apoyar a la comunidad inmigrante, instando a la unión y la información para generar cambios significativos.

“No hago esto por mí, sino por nuestra comunidad. Espero que en el futuro veamos más latinos en oficinas políticas. Muchas personas están esperando que hagamos una diferencia”, concluye.

Estudiante universitaria en camino a convertirse en enfermera neonatal. Disfruta de su trabajo como reportera de La Noticia. Celebra su cultura mexicana en cada oportunidad posible. Le encanta ayudar e...