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San Marcos de León, también conocido como San Marcos Evangelista, fue uno de los doce apóstoles de Jesús y a través de las oraciones se le pide para pedir amansar o calmar el furor de una persona.

Es reconocido como el autor del Evangelio según San Marcos en el Nuevo Testamento de la Biblia. Sus milagros le valieron el calificativo de hechicero, por lo que lo apresaron y torturaron hasta el día de su muerte.

Existe la creencia de que San Marcos de León tiene el poder de calmar o amansar a una persona violenta o agresiva a través de las oraciones, ya que intercede ante Dios en situaciones difíciles.

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Oración corta a San Marcos del León

San Marcos de León, tu que amansaste la Draga y el Dragón,
amansa los toros bravos que también del monte son;
amánsame los enemigos fervorosos,
humíllales ante mí, como se humilló Cristo delante de Pilatos,
que sin necesidad de malos tratos como ovejas sin pastor lleguen a mí;
envíales sin distinción de clases o de nación y ya concritos obtengan el perdón. Déjalos si increyentes dudan de la verdad, de los rumores de la fuente cristalina con suavidad divina hacia la realidad. Hazle venir, Señor Omnipotente, a tomar en mi fuente, agua de humildad. Paz Cristo, Cristo Paz, Paz Cristo, Paz.

Rezar tres veces y cada vez que se concluya un Padre Nuestro sin Gloria y el último con Gloria.

Oración larga a San Marcos del León

San Marcos de León, que evitaste la desgracia del Dragón, amansa los corazones, malos sentimientos, malos pensamientos; infelices contra mí son.

Paz, Paz, Cristo, Cristo, Dominum.

Paz, Paz, Cristo, Cristo, Cristo, Dominum Nostrum.

Con dos los veo, con tres los ato, con este y el Espíritu Santo.

Ojos tienen, no me vean; manos tienen, no me toquen; hierros tengan, no me hieran; lenguas tengan, no me hablen.

Paz, Paz, Cristo, Cristo, Cristo, Dominum Nostrum.

San Juan, tus amigos vienen; déjalos venir.

Paz, Paz, Cristo, Cristo, Cristo, Dominum Nostrum.

Deteneos como se detuvo Nuestro Señor Jesucristo en la hora del trance de su muerte.

Paz, Paz, Cristo, Cristo, Cristo, Dominum Nostrum.

Tus enemigos están bravos como león, pero amansados serán por San Juan y San Marcos de León y llegarán a tus pies como llegó al pie del árbol de la cruz.

Paz, Paz, Cristo, Cristo, Cristo, Dominum Nostrum.


Lic. en Comunicación Social. MBA en Mercadeo. CEO de Link BTL. Disfruto de leer y escribir. Soy madre y esposa agradecida con la vida. jgimenez@lanoticia.com