Translate with AI to

Cifras del período escolar 2020-2021 reflejan que más de 22 mil estudiantes matriculados en los grados K-12 de las escuelas públicas de Carolina del Norte, perdieron su techo. Unos con alguna discapacidad, otros son inmigrantes.

Solo en Charlotte, en el año escolar 2021-22 se contabilizó a 4,152 estudiantes sin vivienda inscritos en las escuelas de CMS, según datos del Departamento de Educación Federal. Pero muchos no están contabilizados, ya que el número de hogares con niños y jóvenes entre 5 y 17 años viviendo en pobreza fue de 24,900.

Esto demuestra que no es insignificante el número de familias que se quedan sin hogar en algún momento difícil económicamente. Al problema se les suma otro: los niños y adolescentes son obligados a cambiar de su escuela original.

Es el caso de una madre del condado de Gastón que está demandando al distrito escolar luego de que los funcionarios exigieron que sus hijos debían cambiar de escuela mientras se encontraban sin hogar. La demandante, identificada como KL, afirma que tras ser desalojada de su vivienda en septiembre del 2023, sus menores estudiantes también enfrentaron el caos de salir de la escuela primaria New Hope y la escuela secundaria Cramerton.

Esta situación es común en muchas familias latinas, que a lo largo de todo un año escolar pueden atravesar la falta de un hogar fijo.

El drama de no tener un vivienda fija

El estado sabe que la mayoría de los estudiantes identificados como sin hogar, solucionan el problema de forma temporal compartiendo vivienda (conocido como situaciones duplicadas). Otros, en peores condiciones, deben vivir en refugios, hogares de transición o hasta en vehículos.

En cualquiera de los casos, las familias que viven duplicadas suelen estar confinadas en una habitación. También enfrentan dificultades adicionales que deterioran la calidad de vida, lo que se incrementa cuando se tienen menores que estudian. La falta de un lugar para estudiar de forma idónea afecta el desempeño escolar.

Si a esto le agregamos los cambios de escuela como el caso de KL y sus hijos, resulta en traumas, estrés, depresión, problemas de adaptación y muchos otros, producto de la pérdida de su estabilidad y grupos originales de estudio.

¿Cómo pedir ayuda para familias con estudiantes sin hogar en Charlotte?

KL decidió demandar a las Escuelas del Condado de Gastón, alegando que el sistema le falló a ella y a sus hijos. Con el fin de apoyar a familias de estudiantes en esas condiciones y a raíz de la Ley federal McKinney-Vento, se creó el Programa de Educación para Personas sin Hogar de Carolina del Norte (NCHEP). Su objetivo es mantenerlos en el sistema educativo en medio de la falta de una vivienda.

Si usted experimenta una situación similar a la de KL viviendo en Charlotte, el Sistema Escolar de Charlotte Mecklenburg (CMS), dispone de un servicio de ayuda conforme al dictamen federal. El tipo de servicio que se brinda es de transporte escolar, programas de tutorías, servicios educativos suplementarios gratuitos e inscripción automática para los almuerzos escolares. También, reciben apoyo de vivienda temporal, acceso a recursos esenciales como ropa, atención de salud, comida y ropa, entre otros.

¿Cómo solicitar estos recursos?

  • Preguntar al trabajador social o al consejero de la escuela donde estudia su hijo.
  • Acercarse a las oficinas administrativas de las escuelas.
  • Llamando al programa de ayuda al 980-343-5986

Lic. en Comunicación Social. MBA en Mercadeo. CEO de Link BTL. Disfruto de leer y escribir. Soy madre y esposa agradecida con la vida. jgimenez@lanoticia.com