Raleigh- Las familias latinas con niños entre los 0 y 5 años de edad son las que menos leen en Carolina del Norte.
Solo el 21.8 %, es decir, 2 de cada 10 familias latinas leen diariamente junto a sus hijos, casi menos de la mitad del resto de las familias de Carolina del Norte. Este porcentaje es el más bajo comparado con el 49.7 % de los afroamericanos y el 46.2 % de los anglosajones, según concluyó “North Carolina Child Health Report Card 2018”, de la organización sin fines de lucro, NC Child.
Motivos
La lectura, además de ayudarle a los niños con su desarrollo es fundamental para ampliar el vocabulario, lo que les permitirá ser más exitosos académicamente y llegar mejor preparados a la escuela, sin importar el idioma que se hable en casa.
La falta de costumbre en la lectura, el desconocimiento acerca de la importancia de la lectura y el creer que para hacerlo solo hay que leerles en inglés, pueden ser factores que no permiten que padres latinos lean a sus hijos, según indicó a La Noticia Laura Tirado, coordinadora del programa El Lenguaje es la Clave del Centro para Familias Hispanas en Raleigh.
Tirado recordó que los padres son los principales maestros de sus hijos. “Cuando hay reuniones escolares están más preocupados por la disciplina que por el desarrollo y aprendizaje. Así es que fundamental que vean todo como una parte integral”, indicó.
Recomendaciones
1) No tema leer en español
“Muchos padres creen que los niños se van a confundir cuando lleguen a la escuela (donde aprenderán inglés) porque les hablan y leen en español en casa, pero eso es una apreciación equivocada”, dijo Tirado.
2) Visite la biblioteca
Tirado recomienda visitar las bibliotecas públicas del estado, donde comúnmente hay libros en español que se pueden llevar prestados a casa por una semana o más tiempo.
3) Evite las pantallas
“Les pedimos que lleven libros que los niños puedan tocar, pasar las páginas. Hay recursos tecnológicos y no estamos en contra de ellos, pero cuando los niños están todo el tiempo frente a la tableta o el celular, no tienen con quién interactuar y su lenguaje sufre y no se desarrolla como debe ser”, indicó.