Charlotte - El gobernador Roy Cooper firmó la ley SB 600, que amplia la posibilidad de que una persona acusada de violencia doméstica pueda ser acusada de asesinato en primer grado.
Antes, si una persona mataba a su pareja, podía ser acusada de homicidio en segundo grado (es decir que mató a la persona sin haber tenido la intención de hacerlo). Ahora con la ley conocida como “Britny’s Law” se permite a los fiscales usar el historial de violencia doméstica del acusado contra la víctima como evidencia de asesinato premeditado (en primer grado).
Cooper firmó otras dos leyes, que también endurecen las leyes estatales contra la violencia doméstica. La HB 343 permite que las órdenes de protección por violencia doméstica se mantengan en efecto, cuando la acusación es apelada.
Además Cooper firmó la ley HB 399 a fin de combatir que se compartan imágenes sexuales sin el conocimiento de las víctimas, pues los abusadores también atacan a sus víctimas en la red..
“La violencia doméstica es un crimen que destruye familias. Estas nuevas leyes dan a los sobrevivientes, más caminos para protegerse a si mismos, y a las autoridades y fiscales más herramientas para hacer a los perpetradores responsables de sus crímenes”, dijo Cooper.
Según la Coalición de Carolina del Norte Contra la Violencia Doméstica, 82 personas perdieron su vida por violencia domésticas en el 2016, y en lo que va del año van 37 víctimas.
La ley es conocida como “Britny’s Law”, por Britny Puryear, cuyos padres buscaban cargos de homicidio en primer grado tras su muerte, luego que el homicida fuera encontrado culpable pero en segundo grado, recibiendo un castigo menor.