Monroe - Los inmigrantes que residen en la ciudad de Monroe, en el condado Union, pueden vivir tranquilos por ahora ya que ni la ciudad ni la policía tiene intenciones de cambiar sus políticas, tras las órdenes ejecutivas del presidente Donald Trump, que han creado confusión y temor entre los indocumentados.
El alcalde Bobby Kilgore, dijo a La Noticia que se ha seguido con las conversaciones regulares con el jefe de policía y que no se han hecho ningún cambio en las políticas de la Ciudad en cuanto a inmigración.
“Nuestros oficiales seguirán sirviendo y protegiendo a cada uno de los residentes, y continuaremos siguiendo las leyes del gobierno en nuestra ciudad, estado y país”, dijo el alcalde Kilgore.
El alcalde señaló que Monroe tiene una comunidad diversa y que como todos los cuerpos gubernamentales están obligados a seguir y aplicar las leyes federales y mandatos.
“Lo seguiremos haciendo porque es nuestra responsabilidad. La Ciudad apoya a todos sus residentes”, anotó.
Kilgore indicó que en estos momentos hay mucha incertidumbre con los cambios propuestos a la ley federal y a la política.
“Esperamos que cualquier nueva ley o política no tenga un impacto negativo en nuestra comunidad. La Ciudad continuará proporcionando el más alto nivel de servicio a cada residente”, afirmó.