El 2023 comenzó con una población de 334 millones de habitantes en Estados Unidos, pero se estima que llegará a un pico de 435 millones al 2100. En este saldo, la inmigración internacional será clave en el crecimiento, marcando un hito demográfico para el país, según proyecciones dadas a conocer por la Oficina del Censo.
La tasa de natalidad (cuántas personas nacen), menos la de mortalidad (cuántas mueren), se conjugan con la inmigración (cantidad de extranjeros que llegan de otros países), para formar los tres elementos que permiten saber cómo se constituirá el mapa de habitantes. En Estados Unidos, las políticas actuales de migración permiten reconocer su relevancia en cuanto a población, raza, edad y sexo.
¿Cómo impacta la inmigración en la proyección demográfica del país?
Las más recientes proyecciones de la Oficina del Censo, estiman que en la segunda mitad del siglo, en el año 2080, habrá 370 millones de personas, con un crecimiento anual de alrededor de 1.5 millones. A partir de ahí, en los siguientes 20 años se marca un descenso poblacional con el que se ubicará en 366 millones.
Este escenario se basa en un nivel medio de inmigración, pero en caso de un alto flujo migratorio ––muy posible considerando el flujo migratorio en la actualidad––, habría 435 millones de habitantes para el año 2100.
Entretanto, en el caso de una baja en los niveles migratorios, la población al final del siglo sería de 320 millones de habitantes. Para entender la importancia de la llegada de personas del extranjero, cabe mencionar que en un escenario sin migración, la población se establecería en 225 millones. Como ya dijimos, esto último es solo una ilustración que deja ver el impacto de las políticas en el futuro de la nación.
¿Cuándo comenzará el descenso de la población?
En el mundo entero habrá un estancamiento de la población, debido a las causas naturales de mortalidad. Acá es donde entran en juego las tasas de natalidad y las migraciones, para contrarrestar el envejecimiento de la población.
De acuerdo con algunas estadísticas, en la década de 2060 habrá un pico con 9,700 millones de personas sobre la Tierra. Llegados a ese punto, la población irá decreciendo hasta establecerse en 8,800 millones de habitantes en el año 2100.
Las proyecciones del Censo avizoran que el 2080 es el año en el que se reducirá la población del país. Solo para contrastar, la única forma de adelantar ese descenso tan pronto como el 2024, es en un escenario irreal de cero migración. Por otro lado, si la migración llega a sus estimaciones más altas, la población siempre estaría en aumento, solo que a un ritmo menor.
Estados Unidos envejece
La población adulta del país, es decir, de más de 65 años, constituirá el 29.09 % de la demografía al 2100. Esto, como resultado del continuo descenso de la fertilidad, de manera que habrá más adultos de 65 años o más en comparación con los niños menores de 18 años. A este momento las mujeres (15.55 %) superarán a los hombres (13.54 %), ya que tienen más esperanza de vida.
Adicional a estos cambios en la distribución de edad, las muertes superarán a los nacimientos de manera progresiva a partir del año 2038, pero no será sino hasta el 2080 cuando se vea la disminución de la población debido a que la migración compensará parte de la cantidad de fallecidos hasta que esa tasa se eleve en mayor proporción.
Dicho de otra forma, aunque los nacimientos serán casi cuatro veces más altos que el nivel de la migración internacional neta en las próximas décadas, en algún punto el número creciente de defunciones igualará la cantidad de nacimientos que puedan contribuir al crecimiento de la población.
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Latinos: segundo grupo de mayor crecimiento en Estados Unidos
Históricamente, la población crece en este orden de proporción:
- Blancos (no latinos, ocupando el 58.9 % de la población)
- Latinos (de cualquier raza 19.1 %)
- Afroamericanos (no latinos un 12.6 %)
- Asiáticos y nativos de Hawái y de otra de las islas del Pacífico.
La proyección es que los tres primeros grupos sigan siendo los predominantes hasta el 2060, independientemente de cómo se comporte la migración.
En el contexto de las migraciones, se estima que la población blanca solamente, no latina, disminuya al 44.9 % en un escenario hipotéticamente medio en cuanto a la llegada de extranjeros. Pero, si se mantienen los altos índices de migrantes, este grupo descenderá a un 42.7 %.
Los latinos, por su parte, ocuparán el 26.9 % en un escenario medio, y en un 27.8 % en la situación hipotética de alto nivel de inmigración.
Por último, se espera que la población negra solamente, no latina, se mantenga en alrededor del 13 % al 2060 en todas las situaciones hipotéticas de inmigración.
Un dato que contrasta es que en 2022, el 13.9 % de la población de Estados Unidos nació en el extranjero. Al 2100, siendo conservadores, este porcentaje subiría a un 19.5 %; mientras en la situación hipotética del alto nivel de inmigración se proyecta un aumento del 24.4 %.
¿Qué estados albergarán a más latinos en las próximas décadas?
En las últimas estimaciones de la Oficina del Censo, no se abordó la distribución de población por estados ni por raza. Sin embargo, recientemente listó las 25 ciudades más pobladas para 2100, y se notó una curiosa coincidencia. Y es que las primeras en el cuado: Dallas-Fort Worth (Texas), Houston (Texas), Austin (Texas), Phoenix (Arizona) y Nueva York (Nueva York), se encuentran en tres de los estados en los que se está concentrando una elevada cantidad de migrantes en los últimos meses.
A pesar de estar copando la disponibilidad de espacios para albergar a más migrantes, Texas, Arizona, Nueva York, California y Florida, que estarían más poblados al final del siglo, son algunos de los lugares favoritos para los extranjeros.
Dentro de Carolina del Norte, resultaron Charlotte, Concord, Gastonia, Raleigh y Cary, como las primeras en cuanto a proyección de población, por lo que podrían resultar sitios favorables para recibir a los recién llegados que buscan el sueño americano.