Corey Johnson era un convicto estadounidense condenado a la pena de muerte por matar a siete personas relacionadas con el tráfico de drogas en Virginia.
Después de una apelación que fue desestimada por la Corte Suprema, se dio luz verde a la ejecución de Corey Johnson por sus delitos.
El convicto perdió su vida el 14 de enero mediante una inyección letal como pena por los crímenes cometidos en el año 1992.
La ejecución se realizó en una prisión ubicada en Terre Haute (Indiana). Los abogados de Johnson hicieron público un comunicado público final del recluso antes del momento de su muerte.
Quiero decir que lo siento por mis crímenes. Quería decírselo a las familias que fueron víctimas de mis acciones y quiero que estos nombres sean recordados
, dijo Johnson y dio un repaso por los nombres de las siete personas que asesinó.
No soy el mismo hombre que era
, indicó el recluso, quien falleció a los 52 años. Luego agradeció a su familia, abogados, capellán y ministro. Finalizó su comunicado expresando: estoy bien. Estoy en paz
.
El periodista Mike Balsamo informó que los abogados de Johnson se manifestaron en un comunicado sobre la pena de muerte del convicto, asegurando que el gobierno federal ejecutó a una persona con una discapacidad intelectual, en total violación de la Constitución y la ley federal
.
Johnson es el preso número 12 en ser ejecutado durante la administración de Donald Trump. En enero también se ejecutó a Lisa Montgomery, la primera convicta que recibe la pena de muerte en casi 70 años.
La Noticia produjo esta nota con información de The Associated Press (AP).