Datos de la empresa Apple fueron confiscados durante las investigaciones secretas realizadas en el gobierno del expresidente Donald Trump contra congresistas demócratas y periodistas.
A partir de mayo se reveló que fiscales federales realizaron una cacería en 2018 para saber quién filtraba información clasificada al inicio de la administración Trump.
Todo ha salido a la luz gracias a la expiración de órdenes mordaza que prohibían a empresas de tecnología revelar que habían filtrado datos en el marco de investigaciones contra periodistas de medios como The New York Times.
La empresa Apple fue objeto de citaciones emitidas por un jurado investigador federal para obligar a la compañía a entregar metadatos —información que puede incluir registros generales de llamadas y mensajes de texto— de los miembros de la Comisión de Inteligencia de la Cámara de Representantes Adam Schiff y Eric Swalwell.
El Departamento de Justicia logró persuadir al jurado para que confiscara datos de estos congresistas, quienes investigaban los vínculos de Trump con Rusia.
Apple dijo que no se había dado cuenta de que la información filtrada contenía datos de los congresistas y confesó que estuvo maniatada ante la orden de confidencialidad firmada por un juez federal al respecto.
Asimismo, la empresa dijo que no tenía información de por qué se realizaba la investigación.
"Habría sido prácticamente imposible que Apple comprendiera la intención de la información deseada sin indagar en las cuentas de los usuarios (...). De acuerdo con la petición, Apple limitó la información que proporcionó a información del suscriptor de la cuenta y no proporcionó contenido como correos electrónicos o fotografías",
dijo la empresa en un comunicado.
Ahora el Departamento de Justicia se encuentra investigando las oscuras pesquisas de la administración Trump contra blancos específicas.
Para más información, suscríbete a nuestro Newsletter. La Noticia produjo esta nota con información de The Associated Press (AP).