Las deducciones y créditos fiscales son herramientas valiosas para reducir la cantidad de impuestos que debes pagar. Mientras que una deducción reduce el ingreso sobre el cual te cobran impuestos, un crédito fiscal disminuye directamente la cantidad de impuestos que debes pagar. Esto puede ser especialmente útil para los trabajadores independientes o autónomos.
Conocer las deducciones y créditos más comunes puede ayudarte a maximizar tus ahorros al declarar tus impuestos. A continuación, te presentamos algunas de las más destacadas para el periodo fiscal 2024-2025.
1. Trabajadores independientes: Deducción por gastos de autoempleo
Si eres un trabajador autónomo, freelancer o contratista independiente, puedes aprovechar múltiples deducciones fiscales que reducirán tu carga tributaria. Algunos gastos deducibles incluyen:
- Millas: Puedes deducir el costo de usar tu vehículo personal para actividades relacionadas con el negocio.
- Primas de seguros comerciales: Si pagas un seguro para proteger tu negocio, este gasto es deducible.
- Comidas y viajes de negocios: Los gastos relacionados con reuniones de trabajo o viajes profesionales son deducibles.
Ejemplo práctico: Si gastas $5,000 al año en viajes y comidas relacionadas con tu negocio, puedes deducir esa cantidad de tus ingresos sujetos a impuestos.
2. Deducción por oficina en casa
Si utilizas una parte de tu casa exclusivamente para actividades relacionadas con tu negocio, el IRS permite deducir ciertos gastos asociados con esa área. Esto incluye:
- Renta o hipoteca: Puedes deducir una porción proporcional de tu renta o hipoteca.
- Servicios públicos: Gastos como electricidad, agua y calefacción pueden deducirse en proporción al uso del espacio.
- Mantenimiento y reparaciones: Los costos de mantenimiento relacionados con el área de la oficina también son deducibles.
Ejemplo práctico: Si tu oficina en casa ocupa el 10% de tu hogar y tus gastos anuales de vivienda son de $12,000, podrías deducir $1,200 de tus ingresos.
3. Deducción por Gastos de Educadores
Los maestros y educadores que incurren en gastos personales para su aula pueden reclamar una deducción especial. Los gastos incluyen:
- Materiales de clase: Libros, papel, lápices y otros suministros necesarios para enseñar.
- Tecnología educativa: Software, tabletas y otros equipos utilizados para mejorar el aprendizaje en el aula.
Ejemplo práctico: Si gastas $250 en materiales escolares durante el año, puedes deducir esa cantidad de tus ingresos, reduciendo tu base imponible.
4. Crédito Fiscal para Mejoras de Eficiencia Energética en el Hogar
Gracias a la Ley de Reducción de la Inflación, los propietarios que invierten en mejoras de eficiencia energética pueden beneficiarse de un crédito fiscal. Las mejoras elegibles incluyen:
- Ventanas y puertas energéticamente eficientes.
- Bombas de calor.
- Sistemas de calefacción y aire acondicionado.
Este crédito permite recuperar hasta $3,200 en inversiones calificadas.
Ejemplo práctico: Si instalas ventanas eficientes por un costo de $5,000, podrías recibir un crédito de hasta $1,500, lo que reduce directamente tu factura fiscal.
Consulta con un asesor fiscal o preparador de impuestos calificado y asegúrate de reclamar todo lo que te corresponde para maximizar tus ahorros.